EFE
El Vaticano abrirá una investigación sobre el cardenal católico escocés Keith O’Brien, acusado por otros sacerdotes de haber cometido acoso sexual en la década de 1980, según reveló hoy la cadena británica BBC.
El religioso, de 75 años, admitió en marzo del pasado año haber mantenido una "conducta sexual inapropiada" y lo hizo pocos días después de haber renunciado al cargo de arzobispo de St Andrews y Edimburgo.
En febrero de ese año, habían trascendido las acusaciones de tres sacerdotes y un exsacerdote, que lo denunciaron por "conducta indebida".
La investigación vaticana estará conducida por el obispo auxiliar de Malta, Charles Scicluna, que interrogará a clérigos de la archidiócesis escocesa para esclarecer si existen evidencias contra el cardenal o contra algún otro religioso.
La cadena británica cita una carta que el sucesor de O’Brien en el arzobispado de St Andrews y Edimburgo, Leo Cushley, envió esta semana a miembros del clero para pedir su cooperación en la investigación de Scicluna.
Cushley afirmó en la misiva que la apertura de ese proceso es "un paso positivo en dirección a la verdad y a una eventual reconciliación".
"Esto quizás no sea algo fácil de hacer, pero es lo correcto", dijo Cushley, que agradeció al papa Francisco y a la Congregación para los Obispos haber dado un paso "indicativo de la seriedad con la que se está tratando este asunto".
"Estaré satisfecho de apoyar al obispo Scicluna si puedo hacerlo de algún modo", aseguró el arzobispo en la misiva, en la que observó que "es importante que estos trabajos se conduzcan de una manera que proteja a aquellos que deseen contribuir a ellos".
El Vaticano aceptó la renuncia de O’Brien el 25 de febrero del pasado año, poco antes de que se celebrara el cónclave para nombrar a un nuevo papa, del que salió elegido Francisco y en el que no hubo representantes británicos.
"Pasaré el resto de mi vida en retiro. No voy a desempeñar ningún papel en la vida pública de la Iglesia Católica de Escocia", dijo entonces O’Brien en un comunicado. EFE