EFE
La embajadora de Estados Unidos en El Salvador, Mari Carmen Aponte, pidió hoy a los padres salvadoreños que eviten que sus hijos se vayan solos o acompañados por otras personas hacia ese país, por el "gran riesgo" que corren.
Cientos de menores centroamericanos indocumentados, entre ellos al menos 337 salvadoreños, están acogidos en un albergue de Arizona (EE.UU.) tras haber sido detenidos luego de cruzar sin acompañantes la frontera con México, problema que es creciente, según las autoridades estadounidenses.
"Estos viajes, que son inciertos y que tienen al fin y al cabo un futuro incierto, no ayudan a nadie, mucho menos a los niños", aseveró Aponte en declaraciones a periodistas.
"Estoy pidiendo la ayuda de todos los padres de El Salvador (…) para prevenir que estos niños hagan estos viajes (…) solos o acompañados por personas que están llevándolos" hacia Estados Unidos, porque "corren un gran riesgo", añadió.
El aumento de la llegada de menores indocumentados "es una gran preocupación para nosotros, porque el bienestar de esos niños es una meta que tenemos", manifestó la embajadora estadounidense.
Muchos de esos menores van, acompañados por traficantes de indocumentados, a reunirse con sus padres que viven en Estados Unidos y otros han huido con sus progenitores u otros familiares del clima de violencia en sus países.
Aponte dijo reconocer que "los retos en El Salvador son difíciles", por los problemas de seguridad, económicos y sociales.
"Sin embargo, no vale la pena poner en riesgo la vida de un niño salvadoreño; esto no es justo para los niños, no es justo para las familias", sentenció.
La Cancillería salvadoreña dijo hoy en un comunicado que el consulado en Tucson (Arizona) brinda asistencia consular a los 337 menores salvadoreños identificados hasta ahora entre los cientos de centroamericanos albergados.
2014-06-11