Trasciende la preocupación en la Casa Real de España, con el diagnóstico de una dolencia hereditaria que recibió el rey emérito Juan Carlos I.
De acuerdo con Cronista, a sus 87 años, el rey emérito ha perdido gran parte de su movilidad, lo cual lo ha obligado a depender de una silla de ruedas de forma permanente.
Felipe VI ha mostrado su preocupación ante el estado de salud de su padre y reafirma su decisión de no llevarlo a España "hasta que los médicos le comuniquen que no hay nada que hacer".
¿De qué padece el Rey emérito?
Juan Carlos I ha sido diagnosticado con una avanzada artrosis, la misma afección que sufrió su madre, María de las Mercedes de Borbón y Orleans, durante sus últimos años de vida.
La enfermedad hereditaria provoca el desgaste del cartílago en las articulaciones y comenzó en el año 2012, cuando el monarca español sufrió una caída en Botsuana.
Desde entonces, ha sido sometido a múltiples operaciones de la cadera y rodilla para tratar sus dolencias y ayudarlo a tener una mejor calidad de vida.
Actualmente, Juan Carlos I se encuentra viviendo en Abu Dabi, donde recibe tratamientos especializados con medicina regenerativa y células madre.
¿Qué ha dicho Felipe VI?
A pesar de que Felipe VI se encuentra en óptimas condiciones, su preocupación crece a medida que pasan los años.
En especial, luego de sufrir hace un par de años una lesión en su muñeca izquierda durante un partido de pádel, lo cual evidencia su fragilidad ósea.
El legado genético de su familia tampoco pasa desapercibido en la vida del monarca, sobre todo, luego de que su abuela y su padre sufrieran la misma enfermedad.
Actualmente, Juan Carlos I se encuentra en silla de ruedas de forma permanente debido al estado en que se encuentra su dolencia.
Visita nuestras sección de: Internacionales
Para mantenerte informado sigue nuestros canales en Telegram, WhatsApp y Youtube