Los graffitis de once artistas brasileños inundan de color lugares emblemáticos de Fráncfort y ocupan la fachada del primer banco alemán, el Deutsche Bank.
Brasil, país invitado de honor en la Feria del Libro de Fráncfort, presenta estos días a algunos de sus artistas más representativos como Hélio Oiticica -en el Palmen Garten- y a los jóvenes que decoran con sus graffitis las metrópolis brasileñas.
Los diseños que se pueden ver en Fráncfort ponen de manifiesto diferencias claras con las obras de creadores estadounidenses y europeos.
En las metrópolis brasileñas se puede encontrar a través de los graffitis una de las manifestaciones artísticas más vivas y dinámicas del arte del país.
El arte en la calle "Street-Art" de Brasil es destacable por la crítica que hace del clima político y social que vive el país y también por una gran variedad de técnicas y estilos.
Once artistas y grupos de artistas de São Paulo y otras ciudades brasileñas han sido invitados por el museo Schirn Kunsthalle para realizar sus creaciones en edificios y lugares emblemáticos de Fráncfort.
El director del Schirn Kunsthalle, Max Hollein, dijo hoy en la presentación de la exposición que "en septiembre la ciudad espera una invasión brasileña de carácter especial".
"Fráncfort se convertirá en el escenario y el lienzo para muchos de los artistas de ‘Street-Art’ más innovadores e importantes en la actualidad" en Brasil, según Hollein.
El director del Schirn Kunsthalle destacó las obras grandes de Alexandre Orion, Fefe Talavera y Speto, que son las que más llamarán la atención estos días en Fráncfort.
El dragón multicolor de Fefe Talavera es el nuevo inquilino de la sede central del Deutsche Bank, banco que cuenta con una de las mayores colecciones de arte del mundo.
El propio Schirn Kunsthalle ha puesto a disposición de los artistas su fachada.
Además, participan Herbert Baglione, Gais, Rimon Guimarães, Jana Joana & Vitché, Nunca, Onesto, Tinho y Zezão.
En São Paulo, las casas de un barrio entero están decoradas con coloridos graffitis, dijo la comisaria de la exposición, Carolin Köchling.
Las obras que se pueden ver en Fráncfort son muy diversas tanto en su estilo como en su contenido y formato.
Algunas son figurativas pero otras abstractas; algunas son divertidas y otras son críticas con la sociedad; algunas son murales de grandes dimensiones pero otras son dibujos efímeros poco llamativos, según explican los organizadores.
Los graffitis de los artistas brasileños van a ocupar desde el 5 de septiembre y hasta el 28 de octubre algunas calles y puentes de Fráncfort e, incluso, una antigua jefatura superior de policía.
Tampoco falta la que es sin duda una de las disciplinas más populares y apreciadas en este arte de la contra cultura: "las pintadas" en trenes.
Onesto y Tinho han vestido los vagones de un metro de la capital financiera alemana, la línea U5.
Además, el Schirn Kunsthalle ha creado una aplicación con todas las informaciones y documentales sobre los artistas, sus obras y su vida en Brasil./EFE