EFE
La policía de Hong Kong devolvió hoy a la normalidad algunas de las calles tomadas por los manifestantes prodemocracia tras varias intervenciones en las que eliminaron una decena de barricadas, pese a lo cual cientos de activistas aún controlan varias vías en tres puntos de la ciudad.
El tráfico del norte de la isla quedó hoy restablecido por la policía después de que agentes despejaran de barricadas la calle Queensway, arteria que atraviesa el área financiera y comercial de la ciudad, y que permanecía cortada desde hacía más de dos semanas por el movimiento Occupy.
En virtud de la advertencia lanzada ayer por la policía de que las calles iban a quedar desbloqueadas pronto, a primera hora de esta mañana 250 agentes retiraron varias barricadas en la zona de Causeway Bay, un área comercial y unos de los tres enclaves donde el movimiento realiza sus protestas.
Ante la mirada de medio centenar de manifestantes que habían pasado la noche a la intemperie, numerosos agentes crearon un cordón policial entre ellos y las barricadas mientras otros policías procedían a limpiar las calles.
Horas más tarde, otros 200 agentes se trasladaron a la zona de Admiralty, desde donde se dirigen las protestas, para desalojar la calle Queensway.
Provistos de martillos, motosierras y hasta una grúa, la policía empleó menos de una hora en retirar las múltiples barricadas ante la mirada de los activistas, que no opusieron resistencia pero sí lamentaron la actuación policial.
"Nos dejan desprotegidos ante la gente que cada día viene aquí a enfrentarse a nosotros. Sabemos que hasta hay miembros de tríadas -bandas del crimen organizado local- que no quieren que estemos aquí, y, si la policía les deja el paso libre, podemos correr un grave peligro", declaró a Efe, Robert Hui, un abogado local.
La calle Queensway fue objeto ayer de desagradables enfrentamientos entre partidarios y medio millar de opositores al movimiento Occupy, quienes trataron de romper las barricadas.
El turbio incidente acabó con tres de los detractores de las sentadas detenidos por portar cuchillos y tenazas.
Horas después, los manifestantes, arropados por trabajadores de la construcción y simpatizantes de las protestas, emplearon varias horas en levantar llamativas barricadas con cientos de andamios de bambú, plásticos, vallas y hasta cemento a lo largo y ancho de la vía, así como en reforzar otras calles en el área de Causeway Bay.
La actuación policial responde a una operación para limpiar las calles de barricadas y restablecer el tráfico en toda la ciudad en la que participan 1.700 agentes y que comenzó en la madrugada del lunes.
El portavoz policial Steve Hui Chun-tak dijo hoy que el objetivo de estas maniobras no es el desalojo de manifestantes, sino eliminar cualquier obstáculo de la calle.
Hui señaló que el barrio de Mong Kok, un área de fuerte carácter local y de elevada actividad comercial donde las barricadas siguen obstaculizando el tráfico en diversos puntos de dos grandes avenidas, será el próximo objetivo policial.
De hecho, un grupo de agentes movió varias barricadas a primera hora del lunes, dando inicio a esta maniobra del gobierno de eliminar las trincheras de forma paulatina.
Tras el desalojo policial de esta mañana, el secretario General de la Federación de Estudiantes, una de las tres organizaciones que lideran las protestas, Alex Chow, señaló que el movimiento Occupy no se retirará de las calles.
La Federación de Estudiantes, interlocutor directo de las protestas con el Gobierno de Hong Kong, insiste en que las autoridades deben retomar el diálogo con los estudiantes sobre la reforma del sistema electoral de la isla, clave para poner fin a las movilizaciones que empezaron el pasado 27 de septiembre.
En una encuesta de popularidad elaborada por la Universidad de Hong Kong, el jefe del Ejecutivo de la excolonia británica, Cy Leung, recibió hoy la segunda peor calificación desde que accedió al puesto en julio de 2012.
2014-10-14