El presidente del Perú, Ollanta Humala, afirmó hoy que su país "ha ganado mucho", al presentar oficialmente ante el Congreso el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (CIJ) en el proceso contra Chile por los límites marítimos.
Humala destacó que esos logros, que significan "más de un 70 por ciento" de lo que el Perú pedía en su demanda, se reflejan en la obtención de "alrededor de 50.000 kilómetros cuadrados" de mar y de plataforma continental y el cierre definitivo de todas las fronteras del Perú tras casi 200 años de vida republicana.
Asimismo, el mandatario recordó que el fallo debe ejecutarse "sí o sí", resaltó que no hay nada pendiente en los límites terrestres con Chile y enfatizó en que la aplicación del veredicto "no puede ser objeto de ningún condicionamiento".
Con esas afirmaciones, Humala descartó algún incumplimiento, rechazó la tesis de sectores chilenos de que el veredicto abrió un "triángulo terrestre" de propiedad no definida y aclaró que no se aceptarán posibles condicionamientos deslizados por políticos chilenos, como cambios en la Constitución o la adscripción a la Convención del Mar.
El discurso de Humala duró 12 minutos. Previamente, el Ejecutivo y el Legislativo habían acordado que no habría intervención de los congresistas y que el mandatario sería orador único.
Humala resaltó la férrea unidad nacional que ha habido en torno al tema, y pidió "conservar ese espíritu de cohesión en esta etapa" de implementación, que incluirá la fijación de las coordenadas geográficas exactas, pues la CIJ mencionó los puntos pero dejó a las partes la tarea de establecer los puntos específicos.
La CIJ decidió el lunes, tras seis años de proceso, que la frontera se mantiene como estaba en las primeras 80 millas, es decir, con una línea recta sobre el Pacífico a partir del Hito 1, pero para las siguientes 120 millas, de las 200 que corresponden a cada uno de los dos países, estableció la línea equidistante que reclamaba Lima.
Así, el Perú ganó unos 20.000 kilómetros de mar que estaban en manos de Chile y unos 28.000 que eran considerados de alta mar y que ahora quedaron comprendidos dentro de las 200 millas peruanas.
El presidente destacó que dos naves del Perú, la militar San Martín y la de investigación científica Melo, ya navegan esas aguas, en el segundo de los casos para determinar la biodiversidad pesquera.
Asimismo, el mandatario prometió que el gobierno tomará medidas para favorecer a los pobladores del departamento fronterizo de Tacna, que siguieron prácticamente sin mar al ratificarse los límites vigentes en las primeras 120 millas.
El Perú ha recibido el fallo como un triunfo, aunque expertos han criticado a la CIJ por algunos puntos y han reconocido que la gran riqueza ictológica de la zona continuará en manos chilenas por tratarse de especies que navegan en la proximidad de las costas.
Chile ha expresado "discrepancia" con el fallo y el presidente Sebastián Piñera planteó la hipótesis del "triángulo terrestre" sin definir, lo que es rechazado por el Perú con el argumento de que el tratado de límites terrestres de 1929, cuya validez fue mencionada explícitamente por la CIJ en el veredicto del lunes, establece el punto Concordia como divisor.
La clase política peruana, muy agresiva entre sí y profundamente dividida, ha estado sin embargo nucleada en torno a la demanda, que dio sus primeros pasos en el gobierno de Alejandro Toledo, fue presentada en el de Alan García y se concretó en el de Humala.
Los congresistas le dieron un prolongado aplauso de pie al equipo jurídico que representó al país ante la CIJ y que estaba presente en el salón, liderado por los ex ministros del Exterior Allan Wagner, José García Belaunde, Manuel Rodríguez Cuadros y Eduardo Ferrero./ DPA