Las autoridades ambientales de El Salvador investigan la muerte de decenas de tortugas causada al parecer por una amplia zona de microalgas tóxicas en el océano Pacífico centroamericano, en un fenómeno similar a otro registrado en 2006.
En aquella ocasión hubo unas 500 tortugas muertas solo en el Pacífico salvadoreño, donde desde finales de julio pasado se han registrado al menos 20 decesos, dijo a Efe el jefe de la Unidad de Humedales del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), Enrique Barraza.
El funcionario dijo tener reportes de que en Guatemala han muerto otros 80 quelonios y que se desconoce si hay casos en los otros países de la región, donde, según el MARN, la mancha de algas se extiende entre Guatemala y Costa Rica.
Expertos del MARN tomaron el pasado jueves muestras de agua del sector afectado por la floración y de tejido de tortugas muertas para establecer si estas fallecieron por las algas tóxicas, que no afectan las playas salvadoreñas sino que están mar adentro.
"Asumimos que esta concentración de microalgas tóxicas puede ser la causa" de la muerte de tortugas, pero "seguimos analizando" las muestras, matizó Barraza.
Según el funcionario, que es un especialista en ecología costera marina, la mortandad de tortugas comenzó a detectarse en la segunda quincena de julio, y "coincide con la expansión de la concentración de clorofila" y microalgas en el mar.
"Hasta la fecha no hemos detectado mayor problema" en moluscos y otras especies marinas que se encuentran cerca de las costas, ni tampoco en humanos, a causa de la toxicidad de las aguas, aclaró.
El MARN explicó el miércoles pasado en un comunicado que las tortugas sí podrían haber sido afectadas porque "nadan largas distancias y en aguas profundas".
La mancha de microalgas fue detectada recientemente por un satélite de la NASA (la agencia espacial de Estados Unidos) a unas 80 millas náuticas (unos 148 kilómetros) de la costa salvadoreña, según reportes del MARN.
Barraza detalló que el tamaño de la zona de floración muestra "variaciones todos los días (…), a veces más pequeña o más grande", en lo cual inciden "los vientos, cambios de temperatura del agua o cambios en las corrientes".
"Lo que hemos observado en el satélite es que puede llegar a los 40.000 kilómetros cuadrados; el 4 o 5 de agosto tenía esa extensión", que es "muy grande", explicó.
El experto del MARN comentó que "estas floraciones se producen en cualquier parte del mundo" derivadas de condiciones propias del mar y de la influencia de factores como los vientos y las temperaturas.
"En Centroamérica existe siempre una zona de floración", situada en el Pacífico entre Nicaragua y Costa Rica, denominada "domo térmico", que en esta ocasión "como que se expandió; hubo una evolución de algas y creció un poco más de lo usual", expuso.
Hasta ahora, según el funcionario, la mayoría de las 20 tortugas muertas en el Pacífico salvadoreño corresponde a la especie golfina; aunque en el área también habitan la carey, la baule y la prieta.
Barraza explicó que algunas tortugas han aparecido muertas y otras moribundas pero "luego fallecen".
Ante la expansión de la mancha tóxica, "en Guatemala incluso la Comisión de Áreas Protegidas nos ha consultado porque ellos tienen un registro de 80 tortugas (muertas) hasta el miércoles" pasado, refirió el funcionario salvadoreño.
Por ahora, "no tenemos registros de tortugas muertas en Nicaragua o Costa Rica", añadió, y recordó que en el Pacífico de Costa Rica y Panamá murieron cientos de quelonios a principios de este año también al parecer intoxicados.
En enero pasado, el Ministerio de Ambiente de Costa Rica informó de la muerte de aproximadamente 280 tortugas marinas en el Golfo Dulce, en el Pacífico sur, mientras que Panamá reportó un problema similar en la zona del Golfo de Chiriquí, Coiba y Puerto Armuelles.
El MARN recordó en su comunicado que "en 2006 un afloramiento de algas tóxicas provocó la muerte de más de 500 tortugas marinas" en el Pacífico salvadoreño. EFE