El Gobierno italiano acordó con las autoridades de Venecia la prohibición a partir de noviembre de 2014 del tránsito de cruceros de gran tonelaje por el Canal de la Giudecca, usado hasta ahora para ofrecer a los turistas una visión más próxima de los encantos de la ciudad.
Según informó el Ejecutivo italiano, esta decisión, que evitará algunos riesgos marítimos para la Ciudad de los Canales (noreste del país), se tomó en una reunión en Roma entre el primer ministro, Enrico Letta; el presidente de la región del Véneto, Luca Zaia, y el alcalde de Venecia, Giorgio Orsoni, entre otros.
La medida supone la ejecución de la disposición introducida en el decreto que aprobó el Gobierno del tecnócrata Mario Monti el 1 de marzo de 2012 sobre la distancia a la que se podían acercar los barcos de gran tonelaje en zonas protegidas, una iniciativa llevada a cabo tras el naufragio frente a la isla del Giglio el mes de enero anterior del "Costa Concordia".
El decreto del Ejecutivo de Monti contemplaba ya la prohibición del tránsito de los barcos de gran tonelaje por el centro de la laguna veneciana, pero dejaba la entrada en vigor del desarrollo de este veto al momento en el que se identificara una ruta alternativa al Canal de la Giudecca.
Esa ruta alternativa para el acceso a la Estación Marítima de Venecia, a la que acuden los cruceros en sus paradas, se ha identificado en el Canal Contorta Sant’Angelo, como desviación del Canal Malamocco-Marghera, más alejado del centro de la ciudad de las góndolas.
"En la valoración del impacto ambiental de esta opción se considerarán naturalmente eventuales soluciones alternativas, incluida la del Canal Víctor Manuel", indica el Gobierno en una nota.
Explica que, además, se revisará el plan portuario veneciano con vistas a identificar lugares alternativos al actual puerto de los cruceros.
Desde el 1 de enero próximo se prohibirá el paso de ferris por el Canal de la Giudecca, con la consiguiente reducción del 25 % del tránsito marítimo delante de la céntrica y turística plaza de San Marcos y del 50 % de las emisiones contaminantes.
Ese mismo día tendrá que reducirse ya hasta el 20 % con respecto a 2012 el número de cruceros de más de 40.000 toneladas por el canal y desde el 1 de noviembre de 2014 se prohibirá definitivamente el tránsito de buques superiores a las 96.000 toneladas.
Las autoridades venecianas garantizarán además una reducción del estacionamiento diario máximo de este tipo de barcos a un máximo de cinco cruceros de más de 40.000 toneladas, así como un menor tránsito durante la jornada, concentrándolos en el amanecer y el atardecer.
Desde la tragedia del crucero "Costa Concordia" en el Giglio diversos colectivos y asociaciones en defensa del medioambiente intensificaron sus protestas por el tránsito de buques de grandes dimensiones por la ya de por sí congestionada laguna de Venecia, con el consiguiente riesgo para el patrimonio estético y natural de la zona./EFE