La Iglesia católica reafirmó hoy su pedido de que se realicen reformas políticas que reconozcan a grupos opositores en Cuba, según declaraciones del portavoz de la Conferencia Episcopal de la isla, monseñor José Félix Pérez.
Se trata de que "los comienzos de cambio en el ámbito económico vayan acompañadados de un cambio también político", dijo Pérez en declaraciones a la prensa extranjera en La Habana.
Un día antes, los obispos cubanos difundieron una carta pastoral en la que pedían reformas políticas además de los ajustes económicos de mercado realizados por el gobierno de Raúl Castro en los últimos años.
Pérez subrayó hoy que la Iglesia espera "una mayor apertura" frente a grupos con un "pensamiento diferente". El gobierno socialista de la isla no permite la existencia de otros partidos al lado del Partido Comunista y acusan a los disidentes políticos de ser "mercenarios" financiados desde el extranjero para desestabilizar el país.
En la carta tiene un "peso específico" el deseo de que haya "una mayor apertura, un reeconocimiento de grupos y de personas que tienen un pensamiento diferente al oficial y que debe ser tenido en cuenta", detalló Pérez, también secretario adjunto de la Conferencia Episcopal.
En los últimos años, la Iglesia o fuentes cercanas a la jerarquía eclesiástica cubana han pedido en varias ocasiones ajustes en el ámbito político de la isla, regida desde hace más de medio siglo por un sistema de partido único.
Los obispos cubanos difundieron el domingo en las iglesias la carta pastoral titulada "La esperanza no defrauda".
"Como ha venido ocurriendo en el aspecto económico, creemos imprescindible en nuestra realidad cubana una actualización o puesta al día de la legislación nacional en el orden político", señalaba el texto.
La propia Iglesia calificó la carta como la más relevante desde la titulada "El amor todo lo puede", publicada en 1993 y leída en clave crítica con la realidad cubana en la época de crisis del llamado "periodo especial".
La carta fue compartida con el gobierno, aseguró Pérez.
"Es práctica de los obispos", señaló. "Con un día de anticipación el texto fue entregado a las más altas autoridades del país". Las autoridades no han comentado el documento.
El religioso también expresó su deseo de que la carta sea "leída e interpretada con ese mismo espíritu constructivo, de servicio, con que los obispos la han escrito".
La Iglesia católica se ha convertido en los últimos años en un importante actor social en la isla, sobre todo tras la llegada de Raúl Castro al poder en 2006. El cardenal Jaime Ortega medió en 2010 por la liberación de un centenar de presos políticos.
Círculos cercanos a la jerarquía eclesiástica publican también dos revistas sobre temas de actualidad, en un país donde todos los medios de comunicación están en manos del Estado.
En el marco de la visita del papa Benedicto XVI a Cuba en marzo de 2012, el gobierno también permitió a la Iglesia difundir sus mensajes en la televisión estatal. /DPA