Los uruguayos consumidores de marihuana y partidarios de legalizarla vivieron hoy con expectación el histórico debate para despenalizar esta droga, en contraste con la pasividad del resto de la población pese a que el 63 % de los ciudadanos está en contra de la iniciativa, según las encuestas.
La Cámara de Diputados de Uruguay, la primera escala del proyecto de ley impulsado hace un año por el presidente del país, el exguerrillero de 78 años José Mujica, fue durante toda la jornada un ir y venir constante de parlamentarios y periodistas.
Los primeros, ultimando sus discursos para intervenir en el debate, y los segundos, intentando obtener cualquier nueva información sobre una votación que se prevé larga e intensa.
El controvertido plan oficialista pretende legalizar la compraventa y el cultivo de marihuana, y establece la creación de un ente estatal regulador que se encargaría de emitir licencias y controlar la producción y la distribución de la droga.
Así, los consumidores previamente registrados podrán comprar marihuana en farmacias especialmente habilitadas, hasta un máximo de 40 gramos por mes, o cultivar en casa hasta seis plantas que produzcan no más de 480 gramos por cosecha.
Desde temprano en el Palacio Legislativo todas las miradas estuvieron puestas en un voto con nombre y apellido: Darío Pérez, diputado del gubernamental Frente Amplio (FA).
Su sufragio se presentaba como decisivo para que la norma sea avalada, ya que el FA tiene mayoría suficiente de 50 votos sobre 99 en la Cámara de Diputados, y todo el partido gubernamental en pleno, con la excepción de Pérez, había anunciado que votaría a favor de la nueva ley.
Hace unas semanas el diputado mostró dudas sobre su posición frente al proyecto y por ese motivo la votación se postergó al último día de julio.
Sin embargo, a media tarde anunció finalmente, durante su intervención en la discusión parlamentaria, que apoyará al resto de sus compañeros en la votación por lealtad con ellos, algo que podría producirse cerca de la medianoche por la cantidad de parlamentarios inscritos para intervenir.
Desde horas antes la tribuna del Parlamento había sido ocupada por una treintena de personas expectante antes las intervenciones de los parlamentarios.
Entre el público había algunos ciudadanos con camisetas de color verde o con el dibujo de la planta de la marihuana para mostrar su apoyo a la iniciativa parlamentaria.
Sin embargo, en el exterior del Palacio Legislativo, reinaba una absoluta calma y todo era casi como un día cualquiera, salvo por la presencia de Marisol Rodríguez, una mujer de 40 años, que mostraba su "total apoyo" a la legalización de la marihuana con una pancarta.
El cartel, una tela negra y con letras rojas colocado en el suelo, rezaba "Marihuana Libre".
"He sufrido en mi familia los efectos de la pasta base (de cocaína), una droga horrible, y creo firmemente que legalizando la marihuana se puede combatir el consumo" de ese otro estupefaciente, argumentó a Efe Rodríguez, que se define como "activista independiente".
Ese es el argumento principal esgrimido por Mujica para sacar adelante el proyecto, pues considera que actualmente los consumidores de cannabis, al ser éste ilegal, se ven forzados a conseguirlo en lugares clandestinos donde tienen también la tentación de obtener pasta base.
Rodríguez, ataviada con un pañuelo en la cabeza con dibujos de plantas de marihuana, se declaró "consumidora de marihuana desde los 22 años" y destacó las "propiedades médicas" del producto, especialmente para las personas que reciben quimioterapia.
Algunos jóvenes que pasaban por la zona le mostraron su apoyo y la aplaudieron, lo que ella consideró una demostración de que la juventud "está muy concienciada y es favorable a regular esta droga".
El lunes la consultoría Cifra difundió una encuesta según la cual el 63% de los uruguayos están en contra del plan gubernamental y solo un 26% lo apoya. /EFE