Diputados del XVII Congreso Infantil de Honduras abogaron hoy por una mejor educación, seguridad y por que los políticos que participarán en las elecciones generales de noviembre próximo hagan una campaña de altura.
Uno de los niños diputados del occidental departamento de Intibucá presentó una moción para que en el presupuesto de la nación de 2014 se destine una partida para la dotación de uniformes y calzado gratis a los estudiantes de preparatoria y primaria, elaborados por microempresarios hondureños.
Los 128 diputados infantiles representan a estudiantes de escuelas de los 18 departamentos de Honduras, a quienes el poder legislativo honró este martes con ocasión del "Día del niño hondureño".
La protección y cuidado de la niñez, mejores centros educativos, más material y otros requerimientos para las escuelas públicas, lo mismo que ayuda a los padres de familia, figuraron entre muchas iniciativas planteadas por los pequeños diputados.
Una representante del departamento de El Paraíso, oriente, Adriana Lucía Mondragón, expresó que Honduras merece vivir en paz para desarrollarse y resolver los problemas políticos, económicos y sociales.
Su iniciativa en el Parlamento se orientó además a pedir a los políticos de los nueve partidos que participarán en las elecciones del 24 noviembre próximo que hagan una "campaña de altura, sin ofensas, solo de propuestas".
Agregó que los anuncios de campaña de los políticos deben ser "positivos" y que estos deben garantizarle a los padres y madres de Honduras el derecho a "elegir la mejor propuesta".
"Una cultura de valores, eso queremos, eso es lo que merecemos", enfatizó Mondragón, alumna del sexto grado de la Escuela Luis Romero, de la ciudad de Danlí, 100 kilómetros al oriente de Tegucigalpa.
Instituciones públicas y privadas, entre otras organizaciones, festejaron este martes a los niños hondureños en su día, aunque muchos que viven en la pobreza y miseria no han tenido esa oportunidad.
En las afueras de la Casa Presidencial, decenas de mujeres con uno o más hijos hacían fila esperando el momento de que la primera dama comenzara a obsequiar juguetes, comida y dulces entre otras cosas a los menores.
"Soy madre soltera, vengo a ver si consigo algo para mis cuatro hijos", dijo a Efe una mujer que se identificó como Edith Ochoa y dijo subsistir "vendiendo tortillas" (de maíz).
Según organismos humanitarios en Honduras, alrededor de un millón de niños son explotados laboralmente desde temprana edad.
En las principales ciudades de Honduras centenares de niños piden a diario en las calles dinero o comida, mientras que otros, que también deberían de estar en la escuela, son enviados por sus padres a vender cosas en las calles.
Algunos pequeños demuestran habilidades artísticas debajo de los semáforos esperando que los conductores les den dinero.
Organismos como el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) y de derechos humanos coinciden en que la niñez hondureña necesita de una mayor atención, tanto del Gobierno como de sus familiares y la sociedad en general. /EFE