DPA
La situación siguió siendo tensa hoy en el mercado bancario chino, pese a la masiva inyección de dinero que hizo la semana pasada el banco central, con una tasa de interés interbancaria en aumento que llegó al 8,84 por ciento.
En el plazo de una semana, la tasa prácticamente se ha duplicado y se acerca el nivel récord del 10,77 por ciento que alcanzó en junio pasado.
El banco central salió la semana pasada al paso de la falta de liquidez y ofreció a ciertas instituciones créditos a corto plazo por valor de más de 300.000 millones de yuan (más de 36.000 millones de euros/49.000 millones de dólares).
La situación actual recuerda a la que se registró a mediados de año, que generó temores de una posible crisis bancaria. En junio, las tasas de interés del dinero que se prestaban los bancos entre sí treparon de forma dramática después de que el banco central cerrara el grifo del dinero a las instituciones financieras.
El objetivo del Banco de China era frenar el excesivo crédito que afecta a la economía del país asiático, pero al final tuvo que dar marcha atrás y volver a inyectar dinero.