La ONU y la responsable de la lucha contra el narcotráfico de Alemania, Mechthild Dyckmans, entregarán este viernes a Bolivia dos hornos modernos para incinerar drogas, que serán los primeros del país, informó hoy una fuente oficial.
El Consejo de la Lucha Contra el Tráfico Ilícito de las Drogas del Gobierno boliviano señaló en un comunicado de prensa que los hornos serán administrados por la policía antinarcóticos de La Paz y de la región oriental de Santa Cruz.
Los hornos son de origen inglés y tienen una capacidad para quemar entre 60 y 90 kilos de cocaína por hora.
La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y los Gobiernos de Alemania, Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña cooperaron con el Ejecutivo de Bolivia para la compra de los dos hornos, cada uno con un precio de 50.000 dólares.
Al acto asistirán también el ministro boliviano de Gobierno, Carlos Romero, y el representante de la UNODC en Bolivia, el peruano Cesar Guedes, que concluirá próximamente su misión en el país andino para asumir la misma función en Pakistán.
Los hornos evitarán cualquier tipo de contaminación y protegerán también al personal policial a cargo de la incineración de la droga decomisada y las sustancias químicas tóxicas que sirven para producirla.
La policía antidroga de Bolivia suele quemar en descampados las toneladas de cocaína que decomisa.
En lo que va del año, la policía ha confiscado más de seis toneladas de cocaína y ha destruido 26 laboratorios de purificación y reciclaje de esa droga, según datos oficiales./EFE