DPA
El padre de Uwe Böhnhardt, presunto coautor de la peor serie de asesinatos neonazis de las últimas décadas en Alemania, aseguró hoy que nunca sospechó del sangriento extremismo de su hijo al declarar en el mediático juicio por los crímenes.
Böhnhardt fue detenido varias veces, robaba y participaba en actos de ultraderecha vestido de neonazi. "Pero en ese momento no sospechamos nada", aseguró su padre, Jürgen Böhnhardt, ante la corte de Múnich. "A lo sumo lo percibíamos de forma subliminal".
Los padres intentaron hablar con Uwe, pero el joven eludía la charla o no respondía. "No nos dimos cuenta de la seriedad de la situación", explicó hoy Jürgen.
Uwe pasó a la clandestinidad en 1998 junto con dos amigos con los que había formado una célula neonazi. La familia, sin embargo, mantuvo aún varios contactos esporádicos. "Les dijimos: ‘Entréguense, vuelvan, las cosas no van a mejorar'", contó el padre.
En el último encuentro, en 2002, el trío anunció que no daría marcha atrás. "Nos dijeron que seguirían adelante y que no nos veríamos más", recordó hoy Jürgen.
Uwe Böhnhardt y otro de los miembros del trío, Uwe Mundlos, se suicidaron en noviembre de 2011 antes de ser detenidos tras robar un banco. La tercera integrante, Beate Zschäpe, incendió la casa que compartían los tres y se entregó a las autoridades.
Las fuerzas de seguridad les atribuyeron entonces por primera vez con una serie de diez asesinatos de inmigrantes turcos perpetrados en toda Alemania de 2000 a 2007, considerada la peor serie de crímenes de ultraderecha en el país desde el Nazismo.
Zschäpe es ahora la principal acusada en el juicio en Múnich que intenta aclarar lo ocurrido. El padre de Böhnhardt pidió hoy perdón a las familias de las víctimas: "Quiero decirles que siento infinitamente lo ocurrido", dijo en su declaración.
2014-01-23