La quema de artículos pirotécnicos por la llegada de la Navidad, el pasado 25, provocó que la contaminación del aire en Lima se incrementara en un 24 % respecto al límite máximo permitido, según informó hoy un portavoz del Ministerio de Salud peruano.
El director ejecutivo de Ecología y Protección del Ambiente de la Dirección General de Salud Ambiental, Elmer Quinchiz, declaró que el límite máximo de material particulado permitido en el aire es de 150 microgramos por metro cúbico (mu/m3), pero la medición hecha en Navidad en la estación de Santa Luzmila arrojó un valor de 186,3 mu/m3.
"Con 186,3 ya estamos hablando de contaminación del aire", apuntó Quinchiz tras explicar que la medición se hizo durante 24 horas continuas.
La estación Santa Luzmila reportó como hora de mayor contaminación ambiental la 1 de la madrugada del día 25 cuando el valor llegó a 186,3 mu/m3, según informó la agencia estatal Andina.
La segunda hora más alta fue al mediodía del día de Navidad, cuando el valor llegó a 154,6 mu/m3.
Quinchiz explicó, en entrevista con Andina, que los principales problemas de salud causados por la quema de pirotécnicos son las alergias a las vías respiratorias, irritación ocular y ceguera porque el azufre, el carbón y los colorantes de la pólvora dañan la vista.
Además, advirtió que "el oído puede tolerar entre 60 y 70 decibeles pero muchos de los pirotécnicos sobrepasan los 120, lo que puede generar problemas auditivos".
El Cuerpo General de Bomberos, las autoridades de salud y de la Policía Nacional han hecho diversos llamados a la población para que evite la compra de juegos pirotécnicos y la quema de los mismos durante las celebraciones de Año Nuevo para evitar los accidentes e incendios que suelen provocar su manipulación, además de la contaminación ambiental.
Los Gobiernos locales han regulado en los últimos años la venta de estos artículos en centros autorizados, pero continúa el comercio clandestino y la Policía ha realizado diversas incautaciones de estos productos en diferentes regiones del Perú. EFE