La aprobación popular del presidente del Perú, Ollanta Humala, descendió seis puntos porcentuales en mayo con relación a abril, mientras que la desaprobación subió en siete puntos, según una encuesta nacional de la firma Datum publicada en Lima.
Humala tiene ahora una aprobación de un 54 por ciento y una desaprobación de un 41 por ciento, según el sondeo nacional, hecho sobre una muestra de 1.216 personas.
El diario "Perú 21″, que publica el sondeo, señala que la caída en la popularidad obedeció a factores como el intento de compra de activos de la petrolera española Repsol por parte de la estatal Petroperú y a la presencia del mandatario en la asunción en Venezuela de Nicolás Maduro.
Un 54 por ciento cuestionó la intención de compra por Petroperú, mientras que un 37 por ciento se mostró a favor. El gobierno retrocedió de esa posibilidad, en medio de un fuerte debate promovido por sectores políticos, mediáticos y empresariales adversos a que empresas estatales ingresen en el mercado.
"El intento de comprar Repsol (en realidad solo una refinería, una cadena de expendios de gasolina y una envasadora de gas de las que la española se piensa deshacer) le pasó factura a Humala", titula "Perú 21″.
Según la encuesta, un 58 por ciento de la población no le cree al presidente su postura a favor de la inversión privada y más bien estima que su manejo se está acercando al del fallecido Hugo Chávez en Venezuela.
En ese marco, Humala, quien en el inicio de su carrera político se identificó con el chavismo, aunque ya en el gobierno asumió posturas liberales-conservadoras, ha recibido muchas críticas por su supuesto apoyo a Maduro, expresado tanto en el viaje a Caracas como en la reunión celebrada en Lima por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
Los índices de popularidad de Humala son sin embargo aún considerablemente altos si se les compara con los que tenían a casi dos años de gobierno sus antecesores Alan García y Alejandro Toledo.