El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró que seguirá "jugando por la paz" del país mediante las negociaciones con la guerrilla de las FARC, al instalar hoy el último año de legislatura del Congreso elegido para el período 2010-2014.
"Que otros se feliciten por la guerra. Yo, Juan Manuel Santos, con la esperanza de 47 millones de colombianos en mi corazón, me la juego por la paz", dijo el mandatario, al criticar a los sectores de oposición que con frecuencia lo fustigan por dialogar con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El jefe de Estado dijo que está empeñado en acabar con cinco décadas de actividad guerrillera porque la paz "es el bien supremo de la humanidad" y porque el país no puede progresar mientras persista la violencia.
"Hablo de la paz como respeto a la vida, la paz como bienestar de los colombianos, la paz como oportunidades para todos, la paz como la realización de un país donde todos cabemos, donde todos podemos aportar y donde todos podemos perseguir la felicidad", expresó.
"Ha llegado el momento de pasar la página y de enfrentar el futuro con una nueva perspectiva: la de 47 millones de personas de bien que trabajan con alegría, con entusiasmo, para tener un país justo, un país moderno y un país seguro", agregó.
Santos se mostró nuevamente optimista sobre el futuro del proceso de paz con las FARC, que se cumple desde noviembre pasado en Cuba, y lo catalogó como "la mejor oportunidad" en la historia para alcanzar un acuerdo con el principal grupo guerrillero, activo desde 1964.
Las partes ya lograron un acuerdo sobre el primer punto de la agenda, referido al desarrollo agrario integral, y discuten ahora el tema de la participación en política de los guerrilleros que eventualmente se desmovilicen.
"Si llevamos a la práctica lo que hemos llamado la Reforma Rural Integral, vamos a transformar radicalmente las condiciones de vida de los habitantes del campo, especialmente de los más necesitados y más victimizados", dijo el presidente.
"Vamos en la dirección correcta y yo voy a hacer todo lo que esté a mi alcance para que ese fin del conflicto sea una realidad (…) La historia nos mira. No nos perdonará si no intentamos acabar de una vez por todas con este desangre inútil. Si no se logra, podremos tener la conciencia tranquila de que hicimos todos los esfuerzos, con seriedad y prudencia", concluyó Santos.
El jefe de Estado cerró con la instalación del Congreso una agitada jornada para celebrar los 203 años de la Independencia de Colombia, que inició en la mañana con un Te Deum en la Catedral Primada de Bogotá y continuó en la tarde con un desfile militar./ DPA