Paola Ñáñez
Agencia EFE
El senador republicano Marco Rubio, presidente del subcomité junto al demócrata Robert Menéndez, ambos autores del texto legislativo de las sanciones contra los funcionarios venezolanos, pidieron al presidente de EE.UU., Barack Obama, que aumente las medidas contra ellos y advirtieron del posible empeoramiento de la situación en el país.
"No se pudieron encontrar pruebas creíbles de intentos golpistas entre la oposición y los diplomáticos estadounidenses, apuesto a que pronto veremos que el Gobierno de Maduro produce pruebas falsas sobre la conspiración golpista", aventuró Rubio.
Por su parte, Menéndez aplaudió la imposición de las sanciones, pero dijo que EE.UU. podría "haber ido más lejos".
"Es importante que todos nosotros reconozcamos que la solución a esta crisis debe llegar por medio de las urnas. Y espero que tengamos la oportunidad de discutir la estrategia diplomática de la Administración para garantizar que las elecciones que Venezuela tiene previstas a finales de este año se lleven a cabo bajo condiciones libres, justas y transparentes", apuntó el senador.
Santiago Cantón, miembro del Centro de Justicia y Derechos Humanos Robert F. Kennedy, alertó en la segunda parte de la audiencia sobre la gravedad de las violaciones de derechos humanos en Venezuela, especialmente en materia de libertad de expresión y las relativas a detenciones arbitrarias.
Cantón rechazó la efectividad de la decisión de Estados Unidos de declarar a Venezuela como amenaza nacional, y alertó del fracaso para manejar la situación que -a su juicio- está protagonizando la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
La "Unasur debería hacer algo, visitas, buscar una mesa de diálogo como hizo en el pasado, pero con más seriedad, porque fracasó. La Organización de Estados Americanos (OEA) tiene que invocar la Carta Democrática Interamericana, y su nuevo secretario general (que será proclamado este miércoles), cogerse un avión a Caracas al día siguiente de tomar posesión", consideró Cantón.
El que fuera secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) subrayó la necesidad de que América Latina "pase de las declaraciones formales a la acción" para detener la crisis venezolana y apuntó que, en este sentido, EE.UU. está en una mejor situación para utilizar la diplomacia en la región.
"Este es el primer Gobierno estadounidense que se ha sentado en una mesa de negociación con Cuba y eso lo legitima frente al resto de América Latina. Tiene que sentarse a negociar con el resto de los países y buscar mecanismos que ayuden a solucionar lo que está ocurriendo en Venezuela", concluyó Cantón.