La petrolera estadounidense Exxon y las británicas British Petroleum (BP) y British Gas (BG) desistieron de participar de la subasta del megayacimiento de Libra, localizado en el litoral de Río de Janeiro, programada para el 21 de octubre próximo, informó hoy la agencia reguladora del sector, ANP.
Según la agencia oficial de noticias ABR, el anuncio de la desistencia de las multinacionales fue realizado por la directora general de la ANP, Magda Chambriard.
"Yo esperaba 40 empresas, pero existe un contexto mundial, situaciones muy específicas de las empresas que llevaron a esta situación", dijo Chambriard, en referencia a la desistencia de las multinacionales.
La ejecutiva dijo que las tres empresas la contactaron telefónicamente para anunciar que desistían de la subasta, la mayor de la historia de Brasil, y subrayó que cada una lo hizo "con sus respectivas particularidades".
Con reservas calculadas en por lo menos 26.000 millones de barriles, el campo de Libra, ubicado a unos 183 kilómetros del litoral del estado de Río de Janeiro, constituye un preciado hallazgo para Brasil, que se suma a las enormes reservas de petróleo y gas descubiertas en aguas ultraprofundas de la llamada capa pre-sal del litoral del país.
Hasta el martes pasado, al menos diez empresas habían manifestado interés en participar de la subasta, cuyo plazo de inscripción concluyó ayer.
La subasta fue blanco de preocupación hace días atrás, después de que el pasado 8 de septiembre la TV Globo revelara que Estados Unidos había espiado la red de computadoras de Petrobras, ente que maneja informaciones clave y confidenciales sobre los yacimientos petroleros brasileños.
La cuarta mayor petrolera del mundo tiene asegurada una participación mínima del 30 por ciento en todos los consorcios y el derecho a ser la única operadora de los yacimientos brasileños de la capa pre-sal.
Al momento de conocerse la información sobre el espionaje, basada en documentos secretos filtrados por el ex agente de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense Edward Snowden, se temió que los espías hubieran obtenido datos confidenciales vinculados a la subasta del campo de Libra, así como información sobre la tecnología aplicada para explotar las camadas de pre-sal, área liderada por Brasil.
Según explicó en su momento el ex director de Petrobras Roberto Villa, la NSA podría haber tenido acceso al mapa con las zonas en las que hay más o menos petróleo, las que son más fáciles de explorar y los que no, entre otras informaciones que darían ventajas desleales a quien las obtuviera.
Sin embargo, la presidenta de Petrobras, Graça Foster, aseguró ayer que no hay indicios de que los servicios secretos estadounidenses hayan logrado acceder a los datos del sistema de comunicaciones de la empresa.
"No hay evidencias de un ingreso al sistema, ni de que hayan sido capturadas informaciones del sistema Petrobras", dijo ante una comisión parlamentaria que investiga las denuncias de espionaje estadounidense en Brasil, del cual también fue víctima, según los documentos filtrados por Snowden, la propia presidenta Dilma Rousseff.
La ejecutiva enfatizó además que Petrobras no suele utilizar Internet para transmitir informaciones estratégicas a la ANP, sino que lo hace en forma "física", mediante entrega de CDs y DVDs. /DPA