Unos 20.000 menores de entre 10 y 17 años de edad son trabajadores del hogar en Colombia, según alertaron hoy el Gobierno y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) con motivo del Día Internacional contra el Trabajo Infantil, que se celebra mañana.
Según un estudio del estatal Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) con la asistencia técnica de la OIT, de los 20.000 niños y adolescentes trabajadores del hogar contabilizados en 2012 en el país, el 70 % (unos 14.000) lo hacen por días y el 30 % (unos 6.000) son internos.
La directora para los países andinos de la OIT, Carmen Moreno, alertó en una rueda de prensa que las largas jornadas laborales a las que están sometidos estos menores, en ocasiones de hasta 60 horas semanales, los hace también más vulnerables al maltrato y los abusos sexuales.
Estas condiciones de vulnerabilidad se incrementan además con una poca o nula remuneración, la carencia de acceso a la seguridad social y, sobre todo, la aceptación social de la familia y el silencio de los empleadores.
"Es un trabajo invisible, lo oculto del hogar hace que haya niños realizando actividades en contacto con objetos y sustancias que no están adaptadas a su edad", alertó Moreno, quien añadió que esta situación "limita su asistencia a la escuela y su derecho al tiempo libre y al juego", necesario para el desarrollo personal.
El estudio refleja asimismo que es en las zonas urbanas donde hay una mayor concentración de este tipo de explotación infantil, con unos 17.000 de los 20.000 niños contabilizados en los canales informales del mercado laboral, lo que supone un 85 % del total.
De estos 17.000 menores registrados en las grandes urbes colombianas, 16.000 son niñas, la mayoría de las cuales proceden de comunidades campesinas pobres que las entregan como trabajadoras domésticas a familias pudientes de la ciudad para que garanticen su subsistencia.
Esto refleja, según Moreno, "el origen estructural del trabajo infantil" por la necesidad de la familia de tener ingresos, de modo que insistió en la importancia de combatirlo con "políticas de generación de empleo y educativas que hagan de la educación un derecho universal, obligatorio y de calidad".
Por su parte, el ministro de Trabajo, Rafael Pardo, resaltó que esta tendencia está decreciendo en Colombia en el grupo femenino de trabajo interno de los 15 a los 17 años que entre 2002 y 2012 disminuyó un 80 %, pasando de los 45.000 a los 17.000 adolescentes.
En Colombia trabajan, según el DANE, cerca de 1,1 millones de menores de entre 5 y 17 años, lo que equivale a una tasa de trabajo infantil del 9,8 %.
Según datos de la OIT, se estima que en el mundo hay 214 millones de menores que trabajan en distintas actividades, principalmente en el sector agrario, seguido del comercio y servicios y de los cuales 10,5 millones lo hacen en el sector doméstico. /EFE