Este Domingo de Ramos se dio inicio a la Semana Santa, período en el que se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo, por ello, desde tempranas horas de la mañana cientos de caraqueños se acercaron a la basílica Santa Teresa, en pleno centro de la capital venezolana, para renovar su fe y participar en la misa en la que se hizo la tradicional bendición de las palmas.
La eucaristía tuvo lugar a las 8:00 de la mañana, contó con la presencia de unos 1.500 feligreses y fue oficiada por el párroco de basílica, Adán Ramírez.
Una de las asistentes a la liturgia fue Reyna Palacios, quien reside en la parroquia Caricuao y manifestó que todos los años asiste a la iglesia Santa Teresa, acompañada de su familia, para bendecir su palma y recordar los últimos días de la vida de Jesús.
Palacios afirmó que el Domingo de Ramos, cuando se celebra la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, es el momento propicio para renovar la fe y reflexionar sobre los valores cristianos: "Yo guardo el ramo bendecido por el párroco en mi casa para recordar que Jesús pagó un precio por proclamar el nombre de Dios en la tierra".
Rafaela Hernández, de la parroquia Antímano, se suma a lo dicho por Palacios al reiterar que a ella lo que la mueve a participar en esta celebración es la fe cristiana.
Otra de las asistentes a la primera misa en la basílica Santa Teresa fue María Pérez, quien destacó el hecho de que toda la familia acuda con devoción a esta celebración de la iglesia católica e invitó a los quienes profesan esa fe a hacer el recorrido por los siete templos el Viernes Santo.
"Esta es una tradición en mi familia y se la estoy enseñando a mis hijos desde pequeños", agregó.
La iglesia Santa Teresa es muy visitada los Domingo de Ramos, debido a que allí se encuentra el Nazareno de San Pablo. Este domingo se celebran cuatro oficios religiosos, a las 8:00 y 10:30 de la mañana, así como a la 1:00 y 5:00 de la tarde.