Bien sabemos que los uniformes de las porristas no tienen bolsillos, y además, debido a la gran cantidad de vueltas y acrobacias que hacen, en cualquier momento pueden dejarlo caer arruinando todo el acto.
Tampoco les gusta dejarlo guardado en un bolso o casillero ya que cualquiera lo podría tomar, y tampoco quieren estar mucho tiempo alejadas de su precioso aparato. Es por eso que tienen que arreglárselas para tenerlo con ellas/ Dogguie