2001online.com | Zulay Camacaro
Tras el decreto de la Gobernación del estado Miranda, que regula las compras de alimentos por número de cédula para prevenir el Covid-19, el gremio comercial asegura que le preocupa la población con poco poder adquisitivo.
El presidente de Fedecomercio, José Lozada, indicó que el gremio evalúa el impacto que puede tener el decreto N° 2020-0100 de la Gobernación del estado Miranda que regula la compra de bienes esenciales de acuerdo al último número de la cédula de identidad.
Señaló que en Fedecomercio “las reacciones están compartidas, por un lado están de acuerdo y entienden su importancia para evitar la propagación del virus y por otro lado complica la dinámica comercial porque delega en el sector empresarial la responsabilidad de la implementación del cronograma de compras”. Al gremio le causa inquietud que las sanciones por incumplimiento van dirigidas a las empresas.
Añadió que “es una medida inspirada en zonas del estado Miranda donde hay mucha aglomeración de personas. Hay otros sectores donde prácticamente no aplicaría porque la densidad de población que va al abasto o bodega es poca y discriminar por cédula no es necesario”. Estimó que en vez de restringir el acceso a los bienes y servicios, es una reorganización de la planificación el consumo.
“Nos preocupa parte de la población que no tiene capacidad de planificación financiera por su propio poder adquisitivo y tendrá que esperar tres o cuatro días para volver a realizar su compra. Es una parte de la población que compra su alimento a diario”, expresó.
En relación al efecto de la medida en las ganancias del sector empresarial, Indicó que “estamos haciendo un esfuerzo para mantenernos operativos, de por sí la pandemia y las restricciones en cuanto a abrir o no los negocios, impactó de manera negativa”.
Lozada comentó que están evaluando casos de éxito en otros países donde se le dio un impulso al sector empresarial, para presentar una propuesta al Ejecutivo que se adapte a Venezuela “y garantizar que el cierre de empresas no sea tan grande”.
Destacó que el mayor punto de riesgo en cuanto al cierre de empresas está en aquellas que no han podido trabajar o aquellas empresas flexibilizadas con el 7 más 7.
Agregó que “empresas priorizadas como abastos, supermercados que si bien es cierto que han abierto, hemos visto una reducción de nuestro flujo de caja en 25%”.
Aseguró que “la implementación el decreto por 30 días traerá pérdidas al comercio mirandino, no puedo dar cifras porque no tenemos ese análisis aún”.
Por su parte, el presidente de La Alianza Nacional de Usuarios y Consumidores (Anauco), Roberto León Parilli indicó que el decreto que regula la compra de alimentos en Miranda “desde el punto de vista legal los derechos del consumidor se ven disminuidos”.
Aseveró que “la Constitución establece el derecho a la seguridad alimentaria y su ejercicio requiere que los alimentos estén disponibles de manera permanente y oportuna, es decir, que se puedan conseguir y comprar cuando se necesiten, no cuando nos toque”.
Afirmó que al establecer mecanismo de control de cédula automáticamente ya te está limitando ese derecho que está en la Constitución. Aclaró que “el aspecto de emergencia económica como fue decretada, implica la restricción de muchas garantías”.
Parilli comentó que habría que ver la importancia y conveniencia de esta medida.”Lo que se ha visto en el primer día de su implementación, es que pareciera que el efecto fue contrario porque se ve gente en cola en los supermercados cuando debería haber menos si tienen un control por cédula”.
Aseguró que “la medida no es conveniente, tampoco reprochable pero creo que será revocada”.
En un recorrido por algunos establecimientos del este de la ciudad se observó que en la mayoría de los establecimientos visitados no se aplicó el decreto de control por cédula para comprar alimentos.
El gerente de un automercado de cadena, quien reservó su identidad, señaló que “no estamos cumpliendo con ese decreto porque de la oficina principal no nos ha dado información ni la Alcaldía tampoco. Nos acogemos si así lo dicen”.
Comentó que no todas las personas pueden hacer compras en un solo día porque no tienen la capacidad económica. “Las ventas podrían bajar porque el fluido de gente no es el mismo”.
La consumidora Teresa Gómez indicó que no compró de acuerdo con su número de cédula. “Me tocaba ayer y necesito comprar hoy, no voy a esperar una semana. No estoy de acuerdo con eso porque la situación no está como para ir un solo día sino cuando se necesite”.
El dueño el Frigorífico Bellomont, Luigi Oliviero dijo que no cumple con el decreto porque “no han dicho nada. Tendríamos pérdidas, no vendemos tanto y se dañaría la carne. Las ventas bajarían más de 80%”.
El encargado de Panadería La Barca, Jonathan González indicó que sabía de la medida por las redes sociales. “por ahora no han dicho nada y la clientela entra normalmente. Al final eso no se cumple y la gente compra cuando quiere. Eso traerá perjuicio porque ya las ventas bajaron 80% y la gente no va a venir casi”.
La usuaria Rosa Martínez expresó que “compré por la cédula en Unicasa, pero no estoy de acuerdo porque me gusta ser libre. Económicamente no puedo comprar una vez a la semana, lo hago cada tres días”.
La administradora de Comercial Santa Ana, Sildy Acevedo aseveró que “si estamos cumpliendo con eso, aunque no estamos de acuerdo y la gente tampoco, están bravos, nos insultan y nos dicen que no vuelven más”.
Añadió Acevedo que “no cierran el local a las 12 y de paso no le podemos vender a la gente que nos quiere comprar”. manifestó la comerciante mirandina.
2020-07-29
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