El desenlace de la desaparición del entrenador venezolano Manuel Rangel, quien residía en Nueva York desde 2016, conmocionó a la comunidad migrante. Rangel, oriundo del estado Trujillo, fue hallado muerto quince días después de que se activara un operativo de búsqueda por parte de la Policía de Nueva York, tras haber sido reportado como desaparecido el pasado 1 de mayo.
De acuerdo con información publicada en el portal web de El Nacional, la desaparición de Rangel ocurrió luego de que asistiera a una fiesta en el sector de East Williamsburg.
Según el testimonio de su pareja, Shakti Castro, al salir del evento el entrenador se dirigió hacia Domino Park y presuntamente se arrojó al East River, un río conocido por sus fuertes corrientes y fondo rocoso, lo que representa un alto riesgo para quienes caen en sus aguas.
El operativo de búsqueda incluyó unidades acuáticas, drones y buzos, y culminó con el hallazgo del cuerpo dos semanas después del despliegue inicial.
Además de su labor como entrenador, Rangel también se desempeñaba como nutricionista en la ciudad de Nueva York. En sus redes sociales, especialmente en Instagram, Manuel Rangel compartía de manera constante aspectos de su vida cotidiana, sus rutinas de entrenamiento y momentos junto a su pareja, mostrando un estilo de vida enfocado en el bienestar físico y emocional.
Además, era conocido por profesar una vida espiritual basada en el budismo y el yoga, prácticas que combinaba con su esfuerzo personal por superar el hábito de fumar, la masturbación y el alcohol.
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