Dadniuska Aristigueta
El trabajo de escolta es considerado uno de los más riesgosos que existe, pues se trata de exponer tu propia vida para proteger la de otro y aunque por esta razón es que se considere que debe morir el guardaespaldas no siempre sucede así.
Tal es el caso de Ginger Beiker Prin Chirinos quien falleció el pasado viernes de 20 abril cuando se dirigía a su casa ubicada en la calle Bolívar de Catia. Antisociales lo interceptaron y le propinaron un disparo, cayó herido en el pavimento momento en el que los delincuentes aprovecharon para despojarlo de la moto donde se desplazaba. El hombre era miembro de la Asociación Bolivariana de Escoltas de Venezuela.
Así como el caso de Beiker, muchos son los crímenes de escoltas en manos de la delincuencia. Según Armando Rodríguez, presidente de la mencionada asociación, la mayoría de las muertes de los guardaespaldas se debe a la prohibición de porte de arma lo que obliga a estos a no tener siempre consigo el arma de reglamento por lo que se convierten en blanco fácil de los criminales.
Otra de las causas es el robo de vehículos puestos que la mayoría de escoltas se trasladan en motos de alta cilindrada que en muchos casos son objetos de atención de los delincuentes.
Según Rodríguez, en lo que va de año ocho escoltas han si asesinados en todo el territorio nacional. Un caso relevante fue el crimen de los tres guardaespaldas en el estado Lara el pasado 29 de enero en una agropecuaria localizada en el municipio Palavecino.
Delincuentes ingresaron al referido lugar para robar los cochinos que allí se criaban y sometieron al vigilante. El dueño de la propiedad pasó por el lugar, notó que las puertas del local estaban abiertas y que el custodio no estaba en su puesto de trabajo.
Los tres escoltas ingresaron al sitio para revisar y conocer lo que estaba pasando dos de ellos fueron sorprendidos por los antisociales quienes les dispararon por la espalda, el otro, se encontró de frente con otro de los delincuentes, pero no le dio tiempo a reaccionar y también fue ultimado a tiros.
Cifras. Durante el año 2017 fueron asesinados ocho escoltas según datos recolectados por el monitor de víctimas. Esta cifra iguala la cantidad de guardaespaldas asesinados durante los primeros cuatro meses del año.
Perfil. De acuerdo a la investigación realizada por el equipo de Diario 2001, La mayoría de los hombres que laboran como escoltas son funcionarios activos de algún organismos policial, en algunos casos abandonas las filas de los cuerpos de seguridad para dedicarse por completo a este oficio debido a que el salario como guardaespaldas supera el sueldo que podrían recibir como funcionarios policiales. En otros casos, el trabajo de escolta se hace de forma paralela a la función policial como una forma de ganar dinero extra.
2018-05-06
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