Katherine Abreu | [email protected]
Edwin Alexander Gudiño Pacheco, de 23 años, fue asesinado de un tiro en la cabeza, la noche del domingo cuando se encontraba en una fiesta cerca de su vivienda, ubicada en Santa Ana, sector Las Torres, en la parroquia Antímano del municipio Libertador.
Familiares indicaron que ese día, en horas de la tarde, un hombre había tenido una discusión con un amigo de Edwin. Aseguraron que la disputa se debía a que la novia de ese sujeto mantenía una relación sentimental con el pana de Gudiño.
A las 11:30 pm del domingo, Edwin salió de su vivienda, para reunirse con unos vecinos y amistades de la zona. En el sitio, mientras iniciaba la celebración, el sujeto de la pelea llegó al lugar acompañado por otras personas. El hombre se encontraba en estado de ebriedad y abrió fuego al azar contra los presentes. En el medio de los disparos se encontraba Pacheco, quien resultó herido al recibir una bala en la cabeza, relataron.
Una madrina del joven estaba presente en la reunión y ella -vía telefónica- contactó a los demás familiares para contarles lo que había ocurrido.
El ruleteo. La familia lo trasladó hasta el hospital Pérez Carreño, donde le pidieron una tomografía. Sin embargo, negaron el ingreso, pues no tenían los insumos para efectuar el examen. De allí lo llevaron a la clínica Loira, y los médicos dieron la misma respuesta.
Ante el desespero de la familia decidieron trasladarlo al Hospital Clínicas Caracas, donde al llegar al centro de salud exigieron a la familia cancelar 7 millones y medio de bolívares para ingresar al joven. La madre de la víctima, Mireya Pacheco, contó que horas después los galenos avisaron a la familia que había fallecido a la 1:00 am del domingo en Emergencia. Denunciaron que también el recinto exigía un pago de 5 millones 800 mil para retirar el cadáver.
“Después que murió querían que pagáramos porque ‘y que’ le habían practicado los primero auxilios, pero a él no le hicieron nada. No les importa la vida de las personas sino el dinero y que uno les pague”, denunció Pacheco. Indicaron que durante el traslado en un taxi el joven convulsionó en varias oportunidades.
Familiares del Gudiño aseguraron desconocer el nombre del sujeto que efectuó los disparos, sólo “de vista”. Además, expresaron que el victimario no vive en la zona. Detallaron que sólo la visitaba de vez en cuando, porque tenía conocidos y asistía a las fiestas.
Gudiño trabajaba como obrero y era el cuarto de seis hermanos.
2017-11-13