EFE
El ministro del Interior de Perú, Walter Albán, reconoció que se ha incrementado la criminalidad en el país, pero aseguró que el Gobierno trabaja intensamente para luchar contra la inseguridad ciudadana.
Albán señaló, en una reunión con la prensa extranjera acreditada en Lima, que en Perú "hay una situación muy marcada por el tema de la criminalidad" que, según añadió, "ha ido en aumento y crea una situación de zozobra."
"Nos parece incontestable que esta situación no se vivía en Perú hace diez años", dijo el funcionario antes de asegurar que el Gobierno ha tomado la decisión de "progresivamente subsanar o mejorar las condiciones" en las que trabaja la Policía Nacional.
Según todos los sondeos de opinión, la criminalidad y la inseguridad ciudadana son para los peruanos el mayor problema que afronta el país y el motivo principal para desaprobar la gestión del presidente, Ollanta Humala.
El ministro señaló, sin embargo, que el último reporte del Instituto Nacional de Estadística e Informática (Inei) indica que el 37,6 % de la ciudadanía afirma haber sido víctima de un delito, aunque la "percepción" del incremento de este problema alcanza al 87,8 % de la población.
Agregó que la tasa de víctimas mortales por delitos en el país es de 6,4 personas por cada 100.000, una cifra que está "bastante por debajo" de otros países de la región.
"Creo que lo que viene ocurriendo es que el punto más débil, si se pretende atacar a este Gobierno, es la inseguridad ciudadana", acotó.
Albán dijo que, en ese sentido, que se está dando "una importante inversión en equipamiento e infraestructura" que "va tres veces más allá de lo que se ha hecho en gobiernos anteriores."
El ministro del Interior señaló que también se ha aprobado un Plan Nacional de Seguridad Ciudadana para el período 2013-2018 y se "trata de mejorar las condiciones de los recursos humanos" de la Policía, con una mejora en la estructura salarial, así como el reforzamiento del trabajo de inteligencia y de investigación criminal.
Añadió que todas esas medidas están dando resultados positivos "pero no aún suficientes" para que sean percibidos por la ciudadanía y consideró que esto se logrará con la reforma del régimen de servicios de "24 x 24″ de los agentes de la Policía Nacional, que hasta ahora trabajaban 24 horas seguidas por 24 horas de descanso.
Esa modalidad es "una debilidad estructural que era indispensable resolver", por lo que el Gobierno comenzará a cambiar ese sistema, que se aplicaba al 70 % del total de 110.000 policías que tiene el país, dijo el funcionario.
Albán también anunció que se estudia un mecanismo para hacer frente a la corrupción y se ha propuesto "una suerte de depuración" en la Policía Nacional, que se aplicará no solo a los agentes que hayan cometido delitos sino también "a los que no estén en condiciones idóneas" para ejercer esa labor.
"En general, en este Gobierno se han tomado decisión muy serias" en la lucha contra el crimen organizado, dijo antes de reiterar que se están logrando "resultados bastante más alentadores que en el pasado."