Durante un vuelo desde Las Vegas, Gloria Estefan presenció un operativo migratorio donde agentes "separaron a una madre de su bebé" según detalló a Canela News: "Había una señora dos filas detrás de mí con un bebé y se lo quitaron de las manos. La mujer empezó a llorar, el bebé empezó a llorar [...] ¿Cuál era la necesidad?".
La artista cubanoamericana, quien obtuvo la ciudadanía estadounidense en 1974, criticó la pérdida de humanidad en estas prácticas migratorias vinculadas a políticas de la era Trump, enfatizando que Estados Unidos es "un país formado por inmigrantes"; este testimonio surge en el marco del lanzamiento de su álbum Raíces, proyecto que describe como "nuestra forma de gritar al mundo quiénes somos" y que reivindica sus orígenes mientras aboga por recuperar valores éticos, contrastando con la experiencia traumática que vivió en el avión donde reafirmó su postura sobre la necesidad de dignidad en el tratamiento migratorio.
Estefan emigró a Miami en 1959 a los dos años, y su nacionalización se facilitó por el servicio militar de su padre en Vietnam; ganadora de la Medalla Presidencial de la Libertad en 2015, su carrera incluye éxitos globales como "Conga" y superó un grave accidente en 1991.
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