El Pentágono instaló una segunda zona militar en El Paso, Texas, que será patrullada por soldados estadounidenses como parte de los esfuerzos de la administración Trump para frenar el cruce ilegal en la frontera sur, a pesar de que los cruces se encuentran en un mínimo histórico.
El Comando Norte del ejército anunció que esta nueva área, que forma parte de la base militar de Fort Bliss, se extiende 85 kilómetros hacia el este hasta Fort Hancock, según reseña The Texas Tribune.
El general Gregory Guillot, comandante del Comando Norte, afirmó que esta segunda Área de Defensa Nacional mejorará la eficacia operativa para combatir actividades ilegales en la frontera.
Este anuncio sigue a la designación de una franja de 18 metros de ancho como zona militar el mes pasado. Recientemente, fiscales federales acusaron a más de dos docenas de migrantes de violar normas de seguridad tras ser detectados por el Ejército.
Frontera militarizada
Geoffrey S. Corn, experto en derecho militar, destacó que la Ley Posse Comitatus prohíbe a las fuerzas armadas hacer cumplir leyes civiles, aunque la administración Trump ha encontrado formas de utilizar a los militares en la aplicación de leyes migratorias.
A pesar de la disminución en los cruces fronterizos, la militarización de la frontera genera preocupación, especialmente por su impacto en la ayuda humanitaria.
Aimée Santillán, analista del Hope Border Institute, advirtió que esta escalada podría criminalizar aún más a los migrantes que buscan asilo.
En 2024, al menos 176 migrantes han muerto en el sector de El Paso, continuando una tendencia alarmante en el aumento de muertes en la frontera.
Visita nuestras secciones: Servicios e Internacionales
Para mantenerte informado sigue nuestros canales en Telegram, WhatsApp y Youtube
