Neri José Alvarado, de 24 años, es uno de los más de 50 venezolanos que fueron deportados de Estados Unidos a El Salvador luego de que la administración de Trump lo identificara como miembro de una organización criminal.
Además, se encuentran otros cuatro individuos provenientes de Yaracuy. Sus parientes cercanos insisten en que todos abandonaron Venezuela buscando una vida mejor, y que “jamás” se involucrarían en actividades delictivas.
Se cree que se encuentran recluidos en el centro penitenciario de Tecoluca, en El Salvador, reseña Diario Yaracuy Al Día.
Según sus familiares, uno de ellos emigró en 2023, emprendiendo un largo viaje hacia los Estados Unidos en busca del llamado “sueño americano”.
Sin embargo, ese sueño se ha transformado en una angustiosa realidad tanto para el joven estudiante de psicología como para sus allegados, quienes no han tenido noticias suyas desde el viernes 14 de marzo.
El joven, residente del sector Sabanita en Yaritagua, municipio Peña, fue aprehendido por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de los Estados Unidos el 4 de febrero, al retornar de su jornada laboral.
El venezolano iba a ser deportado a su país de origen
Se ha conocido que Alvarado mantenía una comunicación regular con sus familiares en Yaritagua.
La última información que les proporcionó fue que su deportación a Venezuela estaba prevista para el 14 de marzo.
Aunque, las adversas condiciones climáticas provocaron el retraso del vuelo.
En este sentido, dijeron: “Ahora no entendemos el motivo por el cual aparece junto a otros connacionales en una cárcel de máxima seguridad en San Salvador, él no forma parte de ninguna banda, pedimos al presidente Nayib Bukele que revise cada expediente de los deportados”.
Según informes de familiares en medios del estado Lara, Neri alcanzó la frontera sur de los Estados Unidos tras un extenuante viaje a través de la selva del Darién.
Durante meses, permaneció en México con la intención de ingresar legalmente a Estados Unidos.
Ante la lentitud del proceso, optó por cruzar la frontera y logró encontrar empleo como panadero, según lo reportado por Noticias Barquisimeto.
Se ha destacado que posee tres tatuajes distintivos: uno con la palabra “familia”, otro con el término “Brothers” (hermanos) y un tercero con el nombre de un hermano suyo que vive con autismo, por lo que se tatuó el símbolo representativo de dicha condición.
Visita nuestras secciones: Servicios e Internacionales
Para mantenerte informado sigue nuestros canales en Telegram, WhatsApp y Youtube