Desde pequeños sabemos que para tener unos dientes sanos y blancos hay que mantener una correcta higiene dental y eso incluye ir al dentista periódicamente.
La estructura del diente tiene un esmalte que es la capa que cubre a toda la corona y es de color blanco azulado translúcido y la dentina -capa siguiente – es la que se encarga de dar la apariencia blanquecina. Pero, no todos tienen la suerte de tener los dientes blancos nacarados al natural, cada persona tiene un tono de dientes distinto que pueden varias entre un blanco amarillento hasta un grisáceo.
Eso no significa que no pueda tenerlos blanco, si mantiene una buena higiene y sigue estos consejos logrará el objetivo:
1 Prepare una mezcla formada por una infusión con 85 gramos de poleo, 10 gramos de romero y una bolsita de manzanilla, y enjuague la boca después de cada limpieza de dientes, conseguirá mantener un aliento fresco todo el día. Y tus dientes estarán también más blancos.
2 Minimice el consumo de alimentos cítricos, ya que pueden dañar el esmalte.
3 Consuma lácteos como el yogur, el queso duro y la leche. Estos alimentos ayudan a mantener los dientes más blancos.
4 Mantenga el hábito de cepillarse los dientes tres veces al día, cada vez que lo haga tome en cuenta que no debe frotar fuerte ya que puede erosionar el esmalte. Compre cepillos de cerda media o suave.
5 No alterne frío con calor este tipo de cambio de temperatura en los dientes es perjudicial y agrietan el esmalte.
6 Fumar en exceso hará que tus dientes se vuelvan amarillos y esto es debido al alquitrán, la nicotina y otras sustancias químicas.
7 Si tus dientes están amarillos, no deje de sonreír por ello. Un truco fácil es cepillarse con agua y bicarbonato, verá como la blancura volverá. Pero no lo haga todos los días; sólo una vez ya que el bicarbonato usado de forma habitual puede afectar al esmalte.
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