AVN
Las puertas del Santuario Diocesano Nuestra Señora de La Candelaria, ubicado en Cantaura, municipio Pedro María Freites, estado Anzoátegui, se abrieron a tempranas horas de este martes para recibir a feligreses y devotos de la Virgen de La Candelaria.
La celebración del día de la patrona de la región oriental inició con un santo rosario y la celebración de la eucaristía de aurora, presidida por el párroco de la iglesia, Trino Sandoval.
Durante la homilía, el padre recordó a la feligresía presente que la conmemoración de este día, de acuerdo con el calendario litúrgico, "se debe a la presentación de Jesús en el templo, como signo de ser luz del mundo que iluminará el caminar de los hijos de Dios y la purificación de María, su madre, después del parto".
María Eugenia Soto, habitante del municipio, comentó que asistió muy temprano al Santuario para celebrar el día de su "Virgen Morena", agradecerle favores concedidos y acompañarla en el día de su honor.
"Año tras año acudo fielmente a la iglesia para darle gracias por su fervor y amor hacia mi persona y mi familia", expresó Soto, quien acudió a la actividad acompañada de su hija María Cristina Guillén y su hermana Delsa Soto.
Por su parte, Saturno López resaltó sentirse alegre por ver que cada año el número de personas asistentes a las festividades de la Virgen de La Candelaria se incrementa considerablemente.
"Me siento feliz de ver cómo viene tanta gente de diferentes municipios del estado y de otras regiones del oriente venezolano para conmemorar, junto al pueblo de Freites, las fiestas de la patrona de Anzoátegui", indicó.
Se espera que en las próximas horas se realice una procesión de unos cinco kilómetros hasta arribar al Paseo de La Virgen, donde se prevé realizar una segunda eucaristía que será presidida por el obispo Jorge Aníbal Quintero, contando con la presencia de los sacerdotes que conforman la Diócesis de Barcelona.
Este martes, la iglesia universal celebra la fiesta de la Virgen de La Candelaria, quien fue declarada patrona de Anzoátegui el 20 de agosto de 1990 por el obispado de Barcelona.
Además, fue coronada como protectora de la entidad cinco años más tarde, cuando la iglesia fue elevada a templo diocesano.
2016-02-02