Zairet González Ramírez @ZaiLez
Conocido popularmente como “Madiba” fue un activista y político sudafricano que lideró los movimientos contra el apartheid y que, tras una larga lucha y 27 años de cárcel, presidió en 1994 el primer gobierno que ponía fin al régimen racista.
Nelson Rolihlahla Mandela falleció un día como hoy en el año 2013 en Johannesburgo luego de sufrir seis meses de críticos problemas pulmonares.
Considerado un símbolo global de libertad y esperanza, defendió la institución de un "país arcoiris" gracias a su extraordinaria personalidad que, personas que tuvieron contacto con Mandela a lo largo de su vida, coinciden en señalar llena de confianza en sí mismo, capacidad de trabajo, valentía, integridad y un importante poder de seducción, características por las que brillaba donde fuese.
Luego de ser prisionero durante 27 años, entre 1963 y 1990, en penosas condiciones, el gobierno de Sudáfrica rechazó todas las peticiones de que fuera puesto en libertad. Nelson Mandela se convirtió en un símbolo de la lucha contra el apartheid dentro y fuera del país, en una figura legendaria que representaba el sufrimiento y la falta de libertad de todos los negros sudafricanos.
En 1990 el entonces presidente de por el Partido Nacional Frederik De Klerk, tuvo que ceder ante la evidencia y en febrero de ese año legalizó el Congreso Nacional Africano y liberó a Mandela, que se convirtió en su principal interlocutor para negociar el desmantelamiento del apartheid y la transición a una democracia multirracial; pese a la complejidad del proceso, ambos supieron culminar exitosamente las negociaciones. Mandela y De Klerk compartieron el Premio Nobel de la Paz en 1993.
Ganó las elecciones de 1994 convirtiéndose así en el primer presidente negro de Sudáfrica (1994-1999) manteniendo a De Klerk como vicepresidente y tratando de atraer hacia la participación democrática al díscolo partido Inkhata de mayoría zulú, al tiempo que puso en marcha una política de reconciliación nacional.
En el año 2001, le fue diagnosticado cáncer de próstata, iniciando así un tratamiento de radioterapia en Johannesburgo. Posteriormente, en 2004 se retiró de la vida pública.
Tuvo una notable presencia en la Copa Mundial de Fútbol de 2010 en su país, donde fue un ejemplo heroico para los seleccionados presentes.
Posteriormente, sería hospitalizado a comienzos de 2011 y finales de 2012 por problemas respiratorios.