Las redes sociales son mucho más de lo que podemos percibir a simple vista, o mejor dicho más de lo que nos dejan ver de forma superficial, estas pueden parecer medios de entretenimiento, el futuro de las comunicaciones virtuales, e incluso poderosas herramientas para potenciarnos en el entono web, pero la verdad es que no son más que medios de trabajo masivo que nos convierte en trabajadores voluntarios que reciben como sueldo una dosis diaria de dopamina al sentir que realmente estamos consumiendo algo, pero realmente estamos trabajando de forma gratuita para estos medios, haciendo de control de calidad, de probadores de contenido entre otras cosas.
Por ejemplo Facebook es la red social más grande en el mundo y posee el mayor número de usuarios activos, navegando en esta red social podríamos sentir que disfrutamos de algo de forma gratuita, diversión, entretenimiento, interacción social y demás, pero la verdad es que solo funcionamos como baterías para alimentar el verdadero sistema que permite operar a este gigante, el que permite lucrar a los inversores, puede que como individuo esto parezca poco, pero en conjunto los millones de usuarios activos realmente juegan un papel crucial para esta empresa, especialmente cuando se trata de estudios de mercado, publicidad, estudios clínicos virtuales, estadísticas de diversos temas.
Y es que pese a recibir una dosis diaria de dopamina sintiendo falsamente alegría, así como diversas emociones al experimentar cosas meramente de forma virtual, solo servimos como empleados remotos que envían datos constantemente a través de cada reacción, publicación y comentario. Incluso para mucho se llega a convertir en una adicción, solo deberías preguntarte en promedio cuando pasas en tu dispositivo u ordenador revisando redes sociales para darte una idea de la seriedad del asunto.
Muchas personas incluso experimentan problemas emocionales y trastornos mentales al no poder tolerar las montañas rusas emocionales que son las redes sociales, donde un momento estas triste por alguna publicación y a la siguiente sonríes compartiendo otra y hablando con algún conocido.
Del mismo modo funcionan Instagram, WhatsApp, y el resto de redes sociales, pero esto no se detiene en este punto, pues además las redes sociales representan un gran riesgo para la seguridad y privacidad de los usuarios en la red, ya que son plataformas demasiado vulnerables, algo que incluso el gigante azul ha demostrado en el pasado con la filtración masiva de información de millones de usuarios. Sin lugar a dudas estos medios virtuales resultan entornos ideales para hackers y piratas electrónicos, e incluso aficionados que por diversión buscan vulnerar cuentas de redes sociales en busca de cualquier cosa que les sirva para ganar ya sea algunos seguidores o algo de dinero.
Extorción, chantaje, robo de identidad y demás, son solo algunos de los peligros que corren los usuarios en las redes sociales al compartir información, datos y archivos ya sea a través de formularios de registro o mediante conversaciones con otros usuarios, mismas que permanecen albergadas en la bandeja de correo de estas plataformas y en caso de ataques pueden ser robadas. Deberías ser consiente que incluso cualquier persona incluso puede acceder a tu cuenta cancelando un módico precio en alguna plataforma de algún hacker para hacerse con tu usuario y contraseña, incluso ahora mismo podrías ser víctima y no saberlo.
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