EFE
Un establecimiento de la cadena de supermercados Tesco en el centro de Londres retiró los pinchos metálicos que tenía colocados frente al local para disuadir a indigentes de ocupar ese espacio, ante las protestas organizadas en las redes sociales.
Poco antes de que decenas de personas se reunieran ante la tienda para protestar contra esas púas, Tesco quitó las placas metálicas con pinchos del establecimiento situado en Regent Street, a pocos metros de Piccadilly Circus, dada la "preocupación" que habían provocado.
"Los clientes nos habían comunicado que se sentían intimidados por algunos comportamientos antisociales frente a nuestra tienda en Regent Street, por lo que instalamos esas púas para solucionarlo", explicó un portavoz de la cadena en la página de Facebook desde la que se organizó la protesta.
"Hemos decidido quitarlas en respuesta a la preocupación que han causado en aquellos que han interpretado que era una medida contra los indigentes. Encontraremos una solución distinta", dijo ese portavoz.
El comunicado de la compañía antes de la protesta hizo que la asistencia fuera menor de la que preveían los organizadores, que contaban con la presencia de cientos de personas.
"Es un día muy emocionante. Hemos organizado esta protesta porque queríamos que se retiraran los pinchos y, media hora antes de que llegáramos, Tesco rápidamente los retiró", explicó a Efe Bianca Todd, portavoz del partido Left Unity.
"Gracias al apoyo de la gente en Facebook, al compromiso que han mostrado, se ha logrado un acción directa, hemos hecho algo al respecto", celebró Todd.
La portavoz de la formación política, que repartió octavillas con el lema "Casas en lugar de pinchos", resaltó que "todos los lugares que tengan ese tipo de púas deben retirarlos, porque va contra la humanidad".
"La pobreza es un problema muy serio. Ante la gente que lo sufre, lo mínimo que podemos hacer es tratarlos con humanidad y respeto", dijo.
La polémica sobre los pinchos para disuadir a indigentes saltó en el Reino Unido esta semana cuando se divulgaron fotografías de ese tipo de puntas metálicas instaladas a la entrada de un bloque de viviendas en Southwark Bridge, en el sur de Londres.
Según los datos que publicó la organización británica de ayuda a los sintecho Broadway Homelessness en 2013, en Londres hay al menos 6.500 personas sin hogar que duermen en las calles.