Aunque El Chavo del 8 es recordado por su humor ingenuo, sus personajes entrañables y las incontables carcajadas que regaló durante décadas, muy pocos saben que Roberto Gómez Bolaños, mejor conocido como Chespirito, estuvo a punto de darle un cierre triste a la historia que marcó a generaciones en toda América Latina.
Según reveló el sitio especializado Chespirito.ORG, el creador del programa habría ideado un final que dejara una huella emocional profunda: el Chavo moriría atropellado mientras intentaba salvar a otro niño. Aunque el accidente no se mostraría explícitamente en pantalla, sí se contemplaba una escena donde los vecinos de la vecindad se despedían del huérfano, con la intención de rendirle homenaje y transmitir un mensaje de amor y nobleza según reseñó Infobae.
Esta propuesta, sin embargo, nunca se concretó gracias a la intervención de Graciela Gómez Fernández, hija de Chespirito y psicóloga de profesión quién al enterarse de la idea, le aclaró que podría tener consecuencias emocionales en el público y más teniendo en cuenta que la mayoría del target eran niños.
En este sentido, el último episodio oficial que se emitió en 1980 fue 'La lavadora de Doña Florinda', un capítulo sin mayor trascendencia narrativa. Aun así, la serie continuó en producción varios años más, hasta 1992, aunque ya sin varias de sus figuras más icónicas.
La salida de Ramón Valdés (Don Ramón) en 1979 y de Carlos Villagrán (Quico) generó una fractura interna en el elenco. Los rumores apuntan a desacuerdos económicos y a tensiones con Florinda Meza, quien había adquirido influencia en la producción tras formalizar su relación con Chespirito. María Antonieta de las Nieves (La Chilindrina) también terminó distanciándose del proyecto, lo que marcó el ocaso de la vecindad más famosa de la televisión.
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