El Super Bowl 2025 no solo fue una fiesta deportiva, sino también un escenario para una batalla de egos entre dos gigantes del rap: Kendrick Lamar y Drake.
Durante el espectáculo de medio tiempo, Lamar cerró su actuación con el polémico tema “Not Like Us”, una canción que ha sido interpretada por muchos como un ataque directo a Drake. La letra, que originalmente incluía la palabra “pedófilo”, fue modificada en la presentación en vivo, pero aún así generó controversia y revivió la enemistad pública entre ambos artistas.
La polémica no terminó ahí. Después del evento, Drake demandó a Lamar por difamación, alegando que la promoción de la canción y su inclusión en el espectáculo de medio tiempo dañaron su reputación y seguridad personal, según reseña el portal AP News.
Fuentes cercanas a la producción del Super Bowl sugieren que la elección de Lamar para cerrar el show con esta canción fue intencional, mientras algunos de los más de 133 presentes en el evento especulan que fue una estrategia para aumentar la audiencia y generar controversia.
Asimismo, la denuncia se extendió contra Universal Music por "beneficiarse económicamente" mientras le aseguran a Lamar el puesto de cabeza de cartel en el Super Bowl.
Ante las circunstancias la productora respondió a las acusaciones de Drake: "Sin duda uno de los artistas más destacados del mundo, con quien hemos disfrutado de una exitosa relación de 16 años, está siendo engañado por sus representantes legales para que tome una medida legal absurda tras otra”, y continuaron, “Es vergonzoso que continúen estas absurdas y frívolas maniobras legales”.
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