Kate Bowman, esposa de Mickey Madden (46 años), denunció ante la policía que el exintegrante de Maroon 5 la agredió el 21 de julio en su residencia compartida. El detonante fue su descubrimiento de que el músico sostenía "conversaciones sexuales con menores de edad" mediante mensajes de texto. Al confrontarlo, Madden reaccionó con furia extrema cuando Bowman "le arrebató el teléfono para revisarlo", desencadenando un ataque físico inmediato.
Tras empujar violentamente a su esposa contra el mesón de la cocina, Madden persiguió a Bowman "en ropa interior hasta las afueras de su residencia", donde la atacó nuevamente. La mujer logró huir y refugiarse en casa de un conocido, evitando regresar al domicilio. Horas después, Madden envió múltiples mensajes de disculpa revelados por Bowman: en ellos expresó arrepentimiento y su "deseo de aceptar ayuda profesional en un programa de rehabilitación por adicción al sexo".
En su denuncia formal, Bowman solicitó una orden judicial que restrinja "cualquier tipo de acercamiento físico" por parte de Madden. Además, pidió permiso para llevarse a sus "dos perros siberianos", buscando seguridad total tras el incidente. Estas medidas legales responden a la gravedad de los hechos, donde la violencia física se suma a las acusaciones de "sexting" con menores aún bajo investigación.
¿Historial Tóxico?
Madden ya enfrentó cargos similares en 2020: su arresto por violencia doméstica provocó su salida de Maroon 5 tras 18 años en la banda. Adam Levine y compañía cortaron lazos con el bajista, marcando un precedente que hoy resuena con fuerza. Este nuevo escándalo, agravado por los presuntos delitos contra menores, podría sellar su exclusión definitiva de la industria musical y acarrear consecuencias penales irrevocables.
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