La economía de la zona euro rebasó tristemente otro hito.
El desempleo entre los 17 países de la Unión Europea que utilizan el euro alcanzó 12% por primera vez desde la inauguración de la moneda común en 1999, según cifras oficiales difundidas el martes.
La Eurostat, la oficina de estadísticas de la UE, dijo que la tasa de febrero se mantuvo invariable en esa alta cifra sin precedentes tras la revisión al alza de la cifra de enero, de 11,9 a 12%.
España y Grecia tienen una masiva desocupación y muchos otros países ven incrementar sus tasas a niveles incómodamente altos.
Un total de 19,07 millones de personas carecían oficialmente en febrero de trabajo en la zona euro, casi dos millones más sobre el mismo mes de un año antes.
En la Unión Europea, de 27 naciones y de la que la zona euro es parte considerable, la tasa de desempleo se ubicó en 10,9%.
"Estos niveles de desempleo inaceptablemente altos son una tragedia para Europa y una señal de la gravedad de la crisis que atraviesan algunos países de la eurozona", dijo el comisionado del Empleo en la UE, Laszlo Andor.
Aunque el desempleo alcanzó otra desalentadora marca sin precedentes, los optimistas advirtieron una señal alentadora.
El incremento de 33.000 personas en la cifra del desempleo en febrero fue el menor nivel mensual desde abril de 2011 y muy por debajo de los 222.000 registrados en enero. Además, Alemania, la economía más grande de Europa, tiene una tasa de desempleo de apenas 5,4%, mucho menor incluso que la de 7,7% en Estados Unidos.
Sin embargo, la estadística de febrero es anterior a la reciente crisis financiera en Chipre.
La preocupación en los mercados es que el caos que rodea el rescate financiero del país ha reavivado el nerviosismo en torno a la vigencia del euro y ha mellado aún más la confianza en toda la zona euro, un factor difícilmente propicio para la creación de puestos de trabajo, la recuperación económica y la estabilidad en el bloque.
"Las secuelas económicas y sociales de un desempleo elevado continúan representando una de las amenazas más importantes al futuro de la zona euro", dijo Marie Diron, directora de asesoría económica en la firma Ernst & Young. /AP