La asociación Handicap Internacional denunció hoy los graves peligros a los que se enfrenta la población civil en Siria por el uso de minas antipersonales y la gran cantidad de bombas sin explotar que quedan en el terreno tras los bombardeos masivos en la guerra que acaba de cumplir dos años.
"Siria ha sido el único país del mundo que ha utilizado minas antipersonales desde el comienzo del año 2012. La población civil corre un peligro grave y duradero por el uso de estas armas bárbaras", expresó la asociación en un comunicado con motivo de la Jornada Mundial contra las Minas Antipersonales que se celebra mañana.
"La crisis siria muestra que el problema del uso de las minas antipersonales continúa estando de actualidad, por lo que la comunidad internacional debe condenar de manera firme su utilización y ayudar a los actores sobre el terreno a poner en marcha medidas que protejan a la población", señala la nota.
Según el informe del Observatorio de Minas para el año 2012, citado por Handicap Internacional, este tipo de armas han sido utilizadas en las fronteras con Turquía y con el Líbano.
Además, el informe recoge que los grupos armados han usado de forma repetida explosivos improvisados, como cócteles molotov y otros de detonación a distancia, y el Gobierno ha empleado en numerosas ocasiones bombas de racimo, armas que esparcen hasta centenares de municiones sobre extensas áreas.
Handicap International se mostró preocupada por el estado de contaminación "importante" en que se encuentran determinadas áreas de Siria como consecuencia del uso de estos tipos de armas, especialmente algunas zonas urbanas.
"Las personas que viven en esas zonas contaminadas o aquellas que regresarán a sus casas cuando finalice el conflicto corren un peligro mortal de forma permanente", sentenció la asociación.
Por otro lado, un responsable de Handicap International, Marion Libertucci, advirtió de que actualmente se tiene una visión parcial del uso de estas armas al no tener acceso a todas las zonas afectadas.
"Es posible que después se descubra que la realidad sobrepasa a nuestra previsiones más pesimistas por lo que es imprescindible llevar a cabo acciones para limitar los riesgos y salvar vidas", añadió.
En este sentido, la asociación afirmó que desarrolla un programa de sensibilización para alertar de los peligros de estas armas y evitar accidentes, del que ya se han beneficiado cerca de 9.000 refugiados sirios en Jordania.
Cada año al menos 4.300 personas son víctimas de minas antipersonales o bombas sin explotar en el mundo, de las que el 70 % son civiles y de ellos, el 42 % son niños.
"Centenares de personas sobreviven a estos accidentes, pero necesitan ayuda de por vida. Sin embargo, los fondos dedicados a la asistencia de las víctimas han disminuido más de un 30 % en el último año, lo que pone en peligro el cuidado de estas personas", agregó la asociación.
Desde hace quince años se han limpiado unos 4.000 kilómetros cuadrados de terrenos minados en el mundo y unas 135 millones de minas han sido destruidas, pero aún quedan millones de ellas en más de 60 países.
Con motivo del la Jornada Mundial contra las Minas Antipersonales, Handicap Internacional se unirá mañana a la campaña "Presta tu pierna", que incentiva a todas las personas a levantarse una pernera del pantalón durante todo el día en solidaridad con las víctimas de minas antipersonales y otros explosivos de guerra. EFE