El arresto del ex dictador Augusto Pinochet en Londres en 1998 significó un "cambio cultural" para Chile, dijo hoy la senadora chilena Isabel Allende en la capital de Alemania, Berlín.
Sólo desde entonces la sociedad entera tomó conciencia de la violación masiva de los derechos humanos bajo la dictadura, opinó la hija del ex presidente Salvador Allende (1908-1973).
"Honestamente yo pienso que el cambio cultural de nuestra sociedad más fuerte se dio con la detención de Pinochet en Londres. La verdad es que en nuestro país por primera vez de esta manera masiva hubo plena conciencia que había habido una violación masiva de los derechos humanos", dijo Allende en una conferencia con motivo de los 40 años del golpe militar organizada por la Fundación Friedrich Ebert (socialdemócrata) en Berlín.
"Eso fue notable, por lo menos para mí fueron los 500 días más felices que he pasado en mucho tiempo", agregó. "Esto significó que hubo una conciencia en Chile que efectivamente cuando se decía asesinato es asesinato, al comienzo se hablaba de excesos, se rehusaba usar la palabra asesinato, se decía pronunciamiento militar para no decir golpe de Estado", dijo la política socialista, prima de la escritora homónima.
Opinó que aunque Pinochet después de volver a Chile nunca fue condenado, al final sí quedó como imputado, como "una persona con serias presunciones de su responsabilidad o culpabilidad". Y además los civiles que lo habían apoyado, que formaron parte de su gobierno, poco a poco fueron distanciándose.
En opinión de Allende, a 23 años de terminar la dictadura todavía no hay una verdadera reconciliación en Chile. "Yo diría que hemos reencontrado ciertos valores pero no diría que hay una verdadera reconciliación. Lo importante para nosotros es que vayamos a un plan de mayor normalidad", dijo destacando que todavía hay "heridas que están abiertas".
Al ser preguntado respecto a las protestas estudiantiles en Chile Allende dijo que su país sigue siendo extraordinariamente desigual, y eso a pesar de los 20 años en que gobernó la "Concertación", una coalición de centroizquierda. "Hicimos muchas cosas, pero claramente todavía tenemos deudas", dijo.
Se mostró optimista de que en las elecciones previstas para noviembre volverá a ganar la izquierda y que la ex presidenta Michelle Bachelet volverá a gobernar el país andino.
Aunque los gobiernos pasados de la "Concertación" no hayan logrado cerrar la brecha social, Allende no pierde la esperanza de que esto se vaya a lograr. "El ser humano tiene que ser optimista porque con puro pesimismo no se llega a ningún lado", dijo.
Por otro lado la hija del primer presidente socialista chileno agradeció la solidaridad internacional recibida después del golpe militar del 11 de septiembre de 1973.
Criticó sin embargo a los países europeos por no haber apoyado suficientemente la democracia chilena en los años previos al golpe.
Relató cómo el entonces embajador mexicano en Chile, Gonzalo Martínez Corbalá, rescató a ella y a su familia el día después del golpe y cómo el gobierno mexicano envió un avión para llevarlos al exilio en el país azteca. "México nos recibió con los brazos abiertos, entre todo el dolor que hubo había un cariño impresionante", dijo. /DPA