EFE
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, consideró hoy "profundamente preocupantes" los informes de ejecuciones sumarias en Irak, y urgió a todos los líderes del país a que eviten represalias por parte de sus seguidores.
Ban, en una declaración emitida hoy por su portavoz, hizo un nuevo llamamiento a los líderes iraquíes para que "se unan en torno a un plan incluyente de seguridad nacional", así como medidas políticas y sociales que confronten la amenaza que sufre el país.
Además, el secretario general advirtió contra la violencia sectaria, "que podría exacerbar el conflicto y crear graves implicaciones en toda la región".
Por ello, acogió favorablemente "la importante declaración" sobre la necesidad de unidad iraquí por parte del ayatolá Sayed al Sistani, "quien representa una voz muy influyente de sabiduría y razón".
Ban condenó la reciente oleada de violencia "a manos de grupos terroristas, incluyendo el Estado Islámico de Irak y el Levante (IEEL)".
También urgió "a todos los líderes iraquíes (políticos, militares, religiosos y comunitarios) para que se aseguren de que sus seguidores evitan los actos de represalia".
Ban Ki-moon pidió que la comunidad internacional "se una en la solidaridad con Irak", y reiteró el apoyo de la misión de Naciones Unidas en el país (UNAMI).
La declaración del portavoz de Ban fue emitida después de que el EIIL divulgara hoy a través de la red social Twitter fotografías de supuestas ejecuciones masivas en las que habrían muerto unos 1.700 soldados iraquíes.