El gobierno de Puerto Rico y uno de los bancos más grandes de la isla están enfrascados en una acalorada batalla en torno a algo más de 230 millones de dólares en momentos en que ambas partes se esfuerzan por fortalecer su posición financiera en una economía tambaleante.
La disputa entre el Departamento del Tesoro y Doral Financial Corp. se agudizó este mes cuando el gobierno anunció que estaba anulando un acuerdo multimillonario con el banco, lo que llevó a un exfuncionario económico estadounidense que asesora a la institución crediticia a advertir el martes que una medida así ahuyentaría aún más a los inversionistas.
"No es opcional para el gobierno de Puerto Rico emitir ese reembolso. Están legal, política y moralmente obligados a hacerlo", dijo el economista Robert Shapiro, que fue subsecretario de Comercio en el gobierno del presidente Bill Clinton y ahora es asesor del Doral Bank.
Barbara Morgan, portavoz del Departamento del Tesoro, no quiso efectuar comentarios al respecto. Dijo que la agencia no comenta públicamente reclamaciones relacionadas con impuestos ni disputas con contribuyentes.
El desacuerdo se produce en momentos en que el territorio estadounidense entra a su octavo año en recesión y pasa apuros para amortizar 70.000 millones de dólares en deuda pública.
El Doral Bank dice que se le debe un reembolso de impuestos por 230 millones de dólares y ha criticado al gobierno por anunciar que el acuerdo ya no era válido.
Melba Acosta, secretaria del Tesoro de Puerto Rico, ha dicho que el gobierno está nulificando el acuerdo de 2012, en parte porque ya había prescrito y porque el acuerdo no había sido reconocido en los libros contables del gobierno al concluir ese año fiscal.
Los reguladores estadounidenses han dicho que el Doral Bank ya no puede incluir esa cantidad en sus estados financieros. En diciembre, esos 230 millones de dólares representaban aproximadamente una tercera parte de los 679 millones de dólares del capital de primer nivel de la institución crediticia, un indicador de la salud financiera del banco.
Shapiro dijo que éste tiene varias opciones, incluida la de recabar más capital o alcanzar un acuerdo con la Corporación Federal de Seguro de Depósitos.
"Puerto Rico lleva algún tiempo sufriendo de una economía que funciona muy por debajo de su nivel adecuado", dijo Shapiro. "Ya hay problemas de liquidez que están surgiendo al respecto en Puerto Rico, y poner en riesgo a otra importante institución financiera de la isla ciertamente que no es lo que un economista recomendaría".
El Doral Bank tiene aproximadamente 300.000 clientes y es el tercer mayor banco de Puerto Rico en activos. /AP