EFE
Guardacostas italianos y buques de varias nacionalidades rescataron el domingo a 2.371 inmigrantes que intentaban llegar a Europa, lo que eleva a 5.851 las personas recuperadas del Mediterráneo este fin de semana.
Las operaciones de salvamento afectaron a 15 embarcaciones -doce lanchas neumáticas y tres barcazas- que navegaban a entre 45 y 50 millas de las costas de Libia, según la Guardia Costera italiana.
En las operaciones de salvamento intervinieron el buque de la Armada británica "Bulwark", la nave de Médicos sin Fronteras "Bourbon Argos" y naves del dispositivo Frontex de la Unión Europea, en particular una inglesa, una sueca, una española y la "Fasan" de la Marina italiana y la "Dattilo" de la Guardia Costera.
Pero a primeras horas de hoy, la Guardia Costera ya había informado del rescate de otros 3.480 inmigrantes en quince operaciones en las que participaron buques italianos y de otras nacionalidades.
Esos inmigrantes viajaban en nueve barcazas y seis lanchas neumáticas, que se encontraban también a unas 45 millas de la costa de Libia, y el servicio de guardacostas precisó que se recibieron llamadas de auxilio a través de un teléfono satélite.
En esas operaciones de rescate, coordinadas por el Centro Nacional de Socorro de la Guardia Costera de Roma, perteneciente al Ministerio italiano de Transporte, participaron tres buques y un avión ATR42 y una unidad de la Guardia de Finanzas.
Además intervinieron unidades de la Marina Militar, el remolcador "Phoenix", los buques de la marina militar alemana "Hessen" y "Berlin" y el "Le Eithne", de la marina irlandesa, que se encontraban en las aguas al sur de Sicilia, precisó el servicio de guardacostas.
La organización con sede en Malta Migrant Offshore Aid Station (MOAS), dijo que además participó en el rescate el buque "Bulwark" y que las embarcaciones ya habían sido localizadas el sábado por la mañana.
MOAS indicó, en un comunicado, que cinco de las pequeñas embarcaciones estaban repletas de personas, la mayor parte procedentes de Eritrea según las primeras informaciones.
De los inmigrantes rescatados el sábado se sabe que ya empezaron a llegar a las costas italianas para recibir asistencia por el personal sanitario y después ser transferidos a centros de acogida.
En concreto, 869 inmigrantes llegaron ya al puerto de Palermo, en la isla sureña de Sicilia, según confirmó a Efe una fuente de la Guardia Costera. De ellos 579 son hombres, 191 mujeres y 99 menores.
Además, fuentes de MOAS confirmaron que a bordo de otras naves se encontraban otros 372 inmigrantes que iban a ser desembarcados en el puerto siciliano de Augusta, en total, 372, 184 son hombres, 126 mujeres y 62 menores, procedentes en su mayoría de Eritrea.
Otros de los inmigrantes rescatados iban a ser llevados a los puertos de Trapani, en Sicilia, y de Taranto, en Puglia (ambos al sur del país), según la Guardia Costera italiana.
La organización maltesa indicó que todos los inmigrantes podrían haber partido del oeste de Libia durante una tregua en los enfrentamientos entre las milicias que operan en esa zona del país y los yihadistas del grupo radical Estado Islámico (EI).
Según las cifras de MOAS, estos últimos rescates elevan, en lo que va de año, a 80.000 el número de personas salvadas de las aguas del Mediterráneo o que han conseguido alcanzar las costas europeas por sus propios medios.
La Unión Europea estudia soluciones para atajar el problema de la llegada masiva de inmigrantes a las costas del continente, mientras centenares de inmigrantes son socorridos prácticamente a diario, en su mayoría en las aguas del Canal de Sicilia.
El ministro británico de Defensa, Michael Fallon, hizo ayer un llamamiento a la Unión Europea para que "se ponga de acuerdo y afronte el problema de raíz", en declaraciones a un canal de televisión italiano.
También sobre este problema habló hoy el presidente de la región Lombardía (norte), Roberto Maroni, de la xenófoba Liga Norte, que reiteró su negativa a acoger más inmigrantes y afirmó que los municipios que acepten a inmigrantes ilegales dispondrán de menos recursos financieros para su gasto.
"Es un hecho gravísimo, escribiré una carta a los prefectos lombardos para persuadirles de no acoger a más inmigrantes clandestinos en la región y también a los alcaldes para que se nieguen a aceptarlos porque no deben estar", afirmó.
"A los alcaldes que los reciban, reduciremos las transferencias regionales como desincentivo para la gestión de los recursos", agregó.
2015-06-07