Agencia DPA
Un día después de poner fecha al referéndum independentista en Cataluña, el gobierno de la región del noreste de España aseguró que está trabajando ya en la elaboración del censo de votantes en la polémica consulta que el Ejecutivo español se ha comprometido a evitar.
"Necesitamos las urnas, los sobres, pero también un censo propio. Si no contamos con la colaboración del Estado hay una serie de instrumentos que todavía no tenemos y que en función del marco legal tendremos que desarrollar", manifestó la vicepresidenta del gobierno regional catalán, Joana Ortega, a la televisión regional TV3.
"Ya estamos trabajando en ello", dijo sobre el censo de votantes. El censo electoral es propiedad del Estado. El gobierno regional de Cataluña lo conoce, pero no puede utilizarlo sin autorización de Madrid.
Además, el Ejecutivo que preside Artur Mas pretende facilitar el voto a los catalanes que viven fuera de la región. "Tienen unas grandes ganas de participar y trabajamos para buscar vías que permitan la participación de los catalanes fuera de Cataluña", dijo Ortega.
Mas anunció el jueves la fecha y el contenido de la pregunta del referéndum de autodeterminación que se propone realizar, tras llegar a un acuerdo con los demás partidos que piden una consulta: será el 9 de noviembre de 2014 y los catalanes deberán responder si quieren "que Cataluña sea un Estado" y, en caso afirmativo, si quieren "que sea independiente".
Pocas horas después del anuncio, Rajoy "garantizó" que no habrá consulta en Cataluña. "Esa consulta no se va a celebrar. Es inconstitucional y no se va a celebrar", dijo el presidente del gobierno español, que en su rechazo cuenta con el apoyo del líder de la oposición, el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba.
Cataluña, con 7,6 millones de habitantes, es la región más fuerte económicamente de España, aunque también es la que acumula una mayor deuda. El independentismo, siempre existente allí, se vio impulsado en los últimos años por la crisis económica y se convirtió en el principal problema político que Rajoy tiene sobre la mesa de la presidencia del gobierno español.
Las últimas encuestas muestran que la mayoría de los catalanes quiere que se celebre la consulta. Los sondeos publicados difieren sin embargo en el apoyo a la independencia, que se mueve según se trate de unos u otros entre el 31 y el 54,7 por ciento.
Viernes, 23/12/2013