La presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner sostuvo que "sólo alguien que no está bien puede reprimir en un neuropsiquiátrico", en referencia a la represión de la protesta que ayer dejó unos 40 heridos en el hospital Borda de la ciudad de Buenos Aires, gobernada por la oposición.
La mandataria consideró que hubo una "increíble represión". "Médicos, pacientes, periodistas, no se salvó nadie. Creo que afuera de los neuropsiquiátricos hay algunos que tendrían que estar adentro", lanzó a través de su cuenta oficial en la red social twitter.
Los empleados del neuropsiquiátrico intentaron resistir el viernes la demolición de un taller para los internados y fueron reprimidos por las fuerzas de seguridad. Entre los heridos hay trabajadores del hospital, pacientes, trabajadores de prensa y policías.
"Lo peor es que las autoridades políticas lo justificaron", lamentó sobre lo acontecido en el barrio porteño de Barracas. "El gran tema es qué hace después el responsable político cuando esto sucede".
El jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, del opositor PRO, justificó el viernes la acción de las fuerzas de seguridad y llamó a "no ceder ante los violentos", que, según afirmó, durante "una hora y media agredieron a la Policía Metropolitana".
"Me cuentan que en el operativo del Borda estuvo el segundo jefe de la (Policía) Metropolitana, Ricardo Raul Pedace", escribió la mandataria.
"Supo ser jefe de la custodia de Néstor (Kirchner) cuando era presidente, como comisario mayor de la Policía Federal". Su fallecido esposo y antecesor "lo separó cuando declaró que el presidente no respetaba los protocolos de seguridad y era imposible cuidarlo de esa manera", recordó.
La jefa de Estado denunció además una "impresionante protección mediática" al gobierno de Macri sobre el tema. "Debería incluirse como materia en las facultades de comunicación social de todo el país", consideró./DPA