La líder de las Damas de Blanco Berta Soler llegó hoy a Washington a contar "la verdadera historia de Cuba" y pedir "apoyo moral y espiritual" frente al gobierno de Raúl Castro, contra el que Estados Unidos debe seguir ejerciendo "mano dura", reclamó.
"Estamos buscando un apoyo moral y espiritual por parte de los gobiernos amantes de la paz y la libertad", dijo Soler al comenzar un encuentro en el Capitolio con los senadores cubano-estadounidenses Marco Rubio, republicano, y con el demócrata Bob Menéndez.
Soler llego a la reunión proclamando "Cuba sin los Castro, Cuba libre" mientras formaba con los dedos de la mano la letra L de libertad.
En declaraciones a periodistas, acusó al Gobierno cubano de "vender una imagen al exterior" que no se corresponde con la real.
"Yo traigo la verdadera historia de mi pueblo porque soy una mujer que sufre día a día atropellos, golpizas, solamente por expresarme y por abogar por la libertad de los presos políticos", denunció.
"Queremos una Cuba donde existan libertades, elecciones libres verdaderas, donde existan cambios reales (…) y queremos que tengan mano bien dura contra el régimen castrista", agregó.
Menéndez por su parte aseguró tras el encuentro que el testimonio de las Damas de Blanco reafirma esta necesidad de "mano dura" frente al gobierno de Castro reclamado por Soler.
"El mensaje que ella trae es bien claro, ellos quieren ver la mano dura al régimen castrista porque los cambios que ellos promueven son cósmeticos, no reales", dijo a periodistas.
Según Menéndez, "la mejor forma de ayudar a activistas como las Damas de Blanco es manteniendo la presión económica al régimen y ayudando a esa oposición dentro de la isla".
Una postura respaldada sin fisuras por su colega republicano Marco Rubio, senador por Florida.
"Hay que tener mano firme con este gobierno (cubano) que utiliza todos los fondos que recibe a través del intercambio económico, pero también con viajes a Cuba, para subsidiar su sistema represivo", afirmó Rubio, uno de los políticos que más ha criticado el reciente viaje de la cantante Beyoncé y su esposo Jay-Z a la isla bajo un programa de intercambio "educacional".
Tras su visita al Capitolio, adonde regresará el viernes para reunirse también con congresistas cubano-estadounidenses, Soler se dirigirá hoy al Departamento de Estado para recoger en nombre de las Damas de Blanco un premio para defensores de derechos humanos que se les concedió en 2011 y que las disidentes cubanas no habían podido recoger en persona hasta ahora.
Con su visita a Washington, Soler se une a la oleada de disidentes que han aprovechado la reforma migratoria que entró en vigor a comienzos de año en Cuba para salir de la isla tras años de permisos denegados. Entre otros, en las pasadas semanas estuvieron de gira en Estados Unidos disidentes como la bloguera Yoani Sánchez o la hija del fallecido Oswaldo Payá, Rosa María, para denunciar la situación en Cuba.
Desde Washington, Soler se trasladará a Miami, donde el sábado participará en un "encuentro-vigilia" en honor a la fallecida Dama de Blanco Laura Pollán y de los "mártires y víctimas de la tiranía castrista durante 54 años de totalitarismo en Cuba", según la convocatoria.
Asimismo, el alcalde de Coral Gables, James Cason, le dará la "llave de la ciudad" a Soler en reconocimiento a su labor en Cuba, de acuerdo con el programa. /DPA