Un lote de 1.449 granadas de fragmentación fueron sustraídas de forma ilegal de una base militar ubicada en el norte de Guatemala, entre enero de 2012 y marzo de este año, según denuncias publicas de la prensa local y ratificada por el Ejército de este país centroamericano.
Las 1.449 granadas, de 40 milímetros para fusiles de asalto M-79, desaparecieron del polvorín de la primera brigada de infantería del Comando Aéreo de las Fuerzas Armadas guatemaltecas, dijo a periodistas el coronel Erick Escobar, portavoz del Ministerio de la Defensa.
Las autoridades militares se percataron de la desaparición de las granadas, que formaban parte del arsenal militar asignado a esa base militar, "durante una revisión" realizada en una fecha no precisa del primer trimestre de este año, explicó Escobar.
Esta sustracción fue denunciada por autoridades castrenses a la Fiscalía el 16 de marzo pasado para que investigara el caso, mientras que autoridades militares realizaron "una investigación interna (…) que terminó con la sanción administrativa a las personas que se hallaron responsables", señaló el portavoz.
El Ejército no informó sobre la identidad de los supuestos responsables de la desaparición del armamento ni de las sanciones que les fueron impuestas.
Según El Periódico, las granadas fueron sustraídas de la instalación militar durante la administración de los generales Juventino Saavedra y Rudy Ortíz Ruiz, este último actualmente jefe del Estado Mayor de la Defensa Nacional.
Una fuente de la Fiscalía dijo este lunes a Efe que "no hay información disponible" sobre la investigación de este caso.
Escobar aseguró que "el Ejército está colaborando en todo momento con la información que se le requiere y cooperando en lo que se le pide y tiene conocimiento"./EFE