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La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afrontará un juicio que podría culminar con su destitución del cargo, por haber violado las leyes de responsabilidad fiscal de Brasil el año pasado.
La solicitud fue hecha por prominentes abogados y miembros de la oposición, los cuales sostienen que Rousseff maquilló el déficit fiscal y gastó más de lo permitido durante 2014.
En el documento también acusan al gobierno por el escándalo de corrupción que afecta a la petrolera estatal, Petrobras.
El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil,Eduardo Cunha anunció el miércoles, después de meses de incertidumbre, la apertura de un juicio político contra Rouseff.
Asimismo, Cunha ha citado este jueves a los líderes de las distintas formaciones para definir las próximas medidas, que pasan en un primer momento por la creación de una comisión especial que analizará la petición.
Rousseff tiene diez sesiones como plazo para presentar sus alegatos ante la citada comisión, que en caso de avalar la petición de Cunha pasaría el testigo al pleno de la Cámara de los Diputados. La propuesta de juicio político debe obtener dos tercios (342) de los votos de esa cámara.
En ese caso, Rousseff quedaría suspendida temporalmente del cargo durante 180 días y sus funciones serian asumidas por el vicepresidente, Michel Temer./Con información de BBC Mundo y EFE.
2015-12-03