La Justicia francesa ha prolongado hoy por un día más el interrogatorio del empresario Bernard Tapie, investigado por un arbitraje que le indemnizó con 403 millones de euros como compensación por la venta de la empresa Adidas en la década de los 90.
Tapie, que declara en calidad de detenido, fue convocado el lunes por la división financiera de la Policía Judicial, y mañana podía ver prolongada su declaración hasta el límite de las 96 horas posibles marcadas legalmente.
La investigación se centra en sospechas de "estafa en banda organizada", y el hecho de que declare como detenido le supone una garantía judicial, al poder estar acompañado de su abogado durante los interrogatorios.
Tapie, de 70 años, tiene que explicar si se benefició de un trato favorable del tribunal de arbitraje privado al que decidió acudir en 2007 la entonces ministra francesa de Economía y actual responsable del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, para sellar el litigio por la venta de la empresa.
Los árbitros estimaron entonces que el empresario no había recibido un trato leal del entonces banco nacionalizado Crédit Lyonnais tras despojarle de la empresa Adidas a mediados de los años 1990, y condenaron al Estado a pagarle esa cuantía, muy superior a la anterior.
Antes de que se iniciara esta semana su declaración, Tapie recordó en la emisora "Europe 1″ que a lo largo de este extenso y complejo contencioso, que dura casi veinte años, ha tenido siete comparecencias como la actual sin llegar a ser imputado.
Aparte de él, casi todos los protagonistas del caso han declarado ante los magistrados, incluida Lagarde, que en mayo pasó 24 horas ante el Tribunal de Justicia de la República (CJR), el órgano competente para juzgar a los ministros.
En su caso se le adjudicó la consideración de "testigo asistido", una figura en la que no se imputa ningún delito y se presta declaración asistido de abogado.
Hasta la fecha, sí han sido imputadas tres personas: Pierre Estoup, uno de los árbitros; Stéphane Richard, presidente director general de la teleoperadora Orange y exjefe de gabinete de Lagarde en su etapa de ministra, y Jean-François Rocchi, expresidente del Consorcio de Realización (CDR), la estructura pública que gestionó el pasivo del banco. EFE